Ha sido un trayecto largo, pero sus caminantes ya han traspasado la última frontera legal. La Generalitat confirmó ayer que las populares danzas de Guadassuar, una de las manifestaciones festivas más tradicionales de la Ribera, ya son reconocidas por la administración autonómica como Bien de Interés Cultural inmaterial (BIC). La aplicación de la nueva figura de protección legal llega semanas antes de la celebración de la edición de este año, que volverá a engalanar las calles del municipio y movilizará a su población con los ritmos y las melodías de la música más tradicional.
El primer intento para que les Danses fueran reconocidas como BIC -desde 1985 están acreditadas como Fiesta de Interés Turístico Nacional- no fructificó por falta de documentación. Ante esta tesitura, hace seis años el proyecto recibió un último espaldarazo de la mano de la Associació d'Amics de les Danses de Guadassuar, una entidad nacida en 2007 que ha capitalizado los trabajos para conseguir la declaración como BIC. Entonces -corría el 2012- se reforzó el expediente con nuevas credenciales. Ahora, la denominación oficial ya es una realidad.
Joan B. Boïls es el actual portavoz de la agrupación y es considerado como una de las voces más reputadas a la hora de analizar el alcance cultural de este acto tradicional. Ayer atendió a Levante-EMV y explicó el trabajo realizado: « En un principio no se tenían referencias similares en la conselleria por ser un caso tan particular y ello provocó la demora en el proceso. Ha valido la pena porque supone el reconocimiento a una fiesta que, si bien está dentro del contexto de les «danses de carrer valencianes», ha conservado una serie de características que las hacen únicas, como son sobre todo la participación de todo el pueblo (les Danses no son de ninguna asociación, ni entidad ni organismo) y el hecho de que nunca han dejado de celebrarse».
«Es un acto original, por lo tanto no se trata de una celebración perdida y reintroducida recientemente ni inventada o copiada de otros lugares donde exista algo similar», enfatizó el experto.
Ferrán Barberà, concejal responsable de Cultura en el Ayuntamiento de Guadassuar, quiso ayer destacar el trabajo desarrollado por la entidad: «Han sido muchas horas, se ha dedicado mucho esfuerzo. Se merecen todo el reconocimiento posible, es un logro para el municipio». En líneas similares se movió Voro Montañana, alcalde de la localidad: «Hablamos de una representación que moviliza a todo el mundo en Guadassuar. Uno de los primeros acuerdos del primer pleno de la actual legislatura apoyó la petición de la entidad que ha impulsado el expediente. Les Danses forman parte de nuestra cultura y tradición. Es una gran noticia», argumentó.
Un traje diferente cada día
Y es que los factores que han llevado al Consell ha reforzar la protección legal de les Danses son muchos y concuerdan con los rasgos propios destacados por los amantes de esta celebración. Así, desde el ejecutivo autonómico destacan que «se trata de una manifestación festiva que se enmarca dentro de las danzas de calle». También apuntan a particularidades: «Son de participación abierta y no se bailan con trajes folclóricos, ya que la tradición marca que cada día se lleve un traje diferente que han confeccionado los propios bailadores».
La danzas de Guadassuar tienen lugar durante la última semana del mes de agosto. Su celebración se asocia a la fiesta de Nuestra Señora de Agosto y San Roque y cierran el ciclo festivo del verano, según las referencias que incluye un acta del ayuntamiento del 12 de agosto de 1742. El decreto establece también una serie de medidas de protección y salvaguardia, que se concretarán cuando se hagan labores de identificación, descripción, investigación, estudio y documentación. La Associació d'Amics de les Danses y el Ayuntamiento de Guadassuar gestionarán este bien inmaterial.
