La asociación La Ribera en Bici-Ecologistes en Acció propuso ayer a la Conselleria de Educación la instalación de una placa de un 1 kilovatio (kW) de potencia fotovoltaica en cada centro de Primaria, Secundaria y Formación Profesional, y de 5 kW en centros universitarios. Según fuentes del colectivo, la inversión correría a cargo del Consell y los centros solo tendrían que aportar un espacio de techo de 8 y 40 m2, respectivamente.

Respecto al presupuesto, la asociación ecologista cree que la conselleria podría dedicar este año 200.000 euros para la instalación de las placas, ya que cada uno cuesta 1.000 y 4.000 euros, según la potencia de 1 o 5 kW. De esta manera, apunta que se podrían ahorrar entre 300 y 1.500 euros al año «de manera que las placas se amortizarían en 3 años». «Hasta 125 centros educativos podrían beneficiarse este año del proyecto, además de la conselleria y la sociedad», indicaron.