Las cifras que maneja este 2019 la Junta Local Fallera ponen de manifiesto una realidad: Alzira y las fallas forman un binomio casi inseparable. Pese a que, como otras muchas fiestas, también tiene sus detractores, la relevancia de las fallas en la capital ribereña queda patente durante estos días. A nivel económico, son muchos los negocios que se benefician de la festividad valenciana, y no sólo los dedicados a la restauración.

Las fallas de Alzira fueron declaradas Fiesta de Interés Turístico Nacional y, hace tres años, obtuvieron el reconocimiento como Patrimonio cultural inmaterial de la Unesco. No es de extrañar, por tanto, que generen una elevada atracción entre el público. Tras los duros años de la crisis, en los que muchos vecinos tuvieron que abrocharse el cinturón y renunciar, entre otras muchas cosas, a pertenecer a una comisión, el número de falleros ha crecido notablemente en los últimos ejercicios.

Crecimiento tras la crisis

En un lustro, el retrato ha cambiado drásticamente. El año 2014 fue uno de los peores para las fallas de Alzira, por lo que a inscritos se refiere. Aquel ejercicio, la capital ribereña contaba con 5.662 falleros. Una cifra muy reducida y marcada, claramente, por la complicada coyuntura económica. Pero a medida que se superaron los años de la crisis, el volumen total de falleros en Alzira ha crecido de manera espectacular. Como el ave fénix, resurgió de sus cenizas. Ya el pasado año se alcanzó la cifra de 6.864 festeros contabilizados por la junta local. Con respecto a 2017, se experimentó una crecida bastante potente, con la suma de más de 300 falleros al censo.

Este año, el crecimiento ha sido similar. Con respecto al pasado año, Alzira cuenta con 340 falleros más. O lo que es lo mismo, el censo ha crecido un 4,65 % en un año. De ese modo, la localidad tiene registrados 7.304 festeros. En base a los registros del Instituto Nacional de Estadística, Alzira contaba a inicios de año con 44.393 habitantes. Ésto supone que el 16,45 % de la población está inscrita a una de las 35 comisiones de la ciudad.

Repunte infantil

El reparto, no obstante, dista de ser equitativo. Las cuatro comisiones con más miembros acumulan prácticamente el 25 % de los falleros de Alzira. Son las siguientes: Plaça Major (579), Camí-Nou (444), Sants Patrons (398) y Gallera-Hort dels Frares (383). Tres de las cuatro comisiones citadas han experimentado, a su vez, un crecimiento de falleros en el último año. Únicamente la dedicada a Bernat, Maria y Gràcia desciende, aunque sólo pierde un miembro con respecto a 2018. Completaría el listado de las cinco fallas con más inscritos la comisión Plaça Alacant (366).

No sólo las grandes comisiones conforman las fallas de Alzira, ya que éstas no serían igual sin sus componentes más humildes. Al otro lado de la balanza, Pere Esplugues es la falla con un menor número de integrantes (61). Le siguen Sant Roc (67), Hernán Cortés (71), Pere Morell (71) y Colmenar (74).

Otro elemento a destacar es la elevada participación de los niños de la ciudad. Pese a que la inmensa mayoría de los falleros son ya adultos (concretamente 5.518), crece el número de menores apuntados a una falla y que, por ende, están llamados a perpetuar la fiesta. Este ejercicio 2019 la cifra es de 1.786 jóvenes enmarcados en la demarcación de infantiles.