Pirotecnia Valenciana se ha ganado un hueco en el corazón de todos los aficionados a las fallas que presenciaron ayer la «mascletà» de Alzira. Más de ochenta kilogramos de pólvora, un excelente espectáculo pirotécnico y un ensordecedor terremoto tuvieron la culpa. Miles de personas quedaron prendadas del trabajo de José Manuel Crespo y su equipo, que fueron ovacionados en dos ocasiones. Entre el público estuvieron, además, dos candidatos a presidir la Generalitat: Isabel Bonig (Partido Popular) y Toni Cantó (Ciudadanos).

Era un soleado sábado, por lo que se conjugaban dos factores de suficiente relevancia como para que la «mascletà» de ayer estuviera de lo más concurrida. Sombreros, gafas de sol y móviles estaban listos para inmortalizara un espectáculo pirotécnico que no dejó a nadie indiferente.

El palco de autoridades también estaba abarrotado. Bien podría haber sido una filial del Senado, el Congreso de Diputados, las Corts u otra cámara representativa. A Cantó y Bonig se sumaron la vicepresidenta de la Diputació, Maria Josep Amigó, la diputada nacional Elena Bastidas y una larga retahíla de alcaldes y concejales de la comarca como Salvador Montañana (Guadassuar), Francesc Salom y Rosa Nicolau (Carcaixent) o Toño Carratalá y Josep Puig (Alberic), entre otros.

La de ayer fue, en palabras de Crespo, «una 'mascletà' valenciana clásica, con sus efectos digitales y con una gran apuesta por un final aéreo contundente y un terremoto muy fuerte». «Estamos muy satisfechos de cómo ha salido y muy contentos del éxito que ha tenido», añadió el responsable del disparo pirotécnico.

Tras el ensordecedor terremoto, el público lanzó una sonora ovación. Los pirotécnicos se congratularon tras la «mascletà» y, reunidos frente al público, fueron de nuevo ovacionados.