Hace ya tiempo que son tristemente famosas las larguísimas colas y tiempos de espera en la ITV de Alzira. Ha tenido que llegar julio de 2019, sin embargo, para que alguien proteste ante esta situación. Un vecino de Alzira tramitó anteayer una reclamación en el registro de entrada del Ayuntamiento de Alzira en la que describía su particular vivencia en el centro de inspección de vehículos. Hasta cinco horas y cuarto de espera tuvo que afrontar este vecino de la localidad, tal y como reseñó en la queja a la que ha tenido acceso Levante-EMV, para poder realizar el examen obligatorio de su coche, al que acudió sin cita previa. Un «abuso», según explicaba en la citada nota, «que a base de mantenerse durante años parece normal y algo a lo que la ciudadanía debe acostumbrarse y aceptar, cuando realmente no lo es», valoraba.

El problema se agrava, según incidía este alcireño en su escrito, si se tiene en cuenta que el tiempo de espera a la hora de pedir una cita previa para la inspección del vehículo se sitúa entre los dos y tres meses. Así las cosas, o el cliente libera su agenda a dos meses vista para acudir al examen con cita previa, o bien pide librar una jornada de trabajo para poder afrontar la cola sin la presión de una hora tope en la que tener que marcharse.

De hecho, para evitar que la pérdida de tiempo durante la jornada laboral sea mayor, la reclamación deja anotada cómo es habitual que en las primeras horas de la madrugada ya haya personas haciendo cola con sus vehículos a las puertas del centro de la ITV en Alzira. Y a las siete de la mañana, cuando abre sus puertas, el rastro de coches que esperan entrar para pasar su reconocimiento obligatorio se alarga hasta la misma entrada al polígono, desde la autovía que une Alzira con Algemesí, alrededor de cuatrocientos metros.

«Somos administrados y además clientes», remata la reclamación interpuesta en el Ayuntamiento de Alzira, «y contrariamente a ello se nos trata con el mayor de los desprecios, al instaurar como normales esperas medias de cinco horas para pasar una ITV».

Inspección y correcciones

«Llevamos así ya varios años sin que la administración valenciana tome medidas», acusaba el afectado en su reclamación. Por ello efectuaba dos solicitudes. En primer lugar, la realización de una inspección oficial para que la administración pública compruebe la espera media que el cliente espera cada vez que acude a la ITV de Alzira. Y, en segundo término, la puesta en marcha de las medidas correctoras oportunas para que el «servicio público» de las inspecciones «funcione con la normalidad que debe esperarse del mismo».

«Es un desastre»

Clientes de la central de la ITV alcireña refrendaban ayer por la tarde las protestas que había lanzado por la vía burocrática el vecino de la localidad. «Es un desastre», coincidían en definir. A la una de la tarde la cola ya solo se concentraba dentro del mismo recinto de la instalación. Una pareja de mujeres, que habían llegado las últimas, incluso habían traído sillas para esperar a la sombra. Decían aguardar «una cola de unas dos horas o tres». En los primeros puestos hacían tiempo algunos clientes que sí decían haber esperado «alrededor de tres horas». Esperaban estar una más hasta acabar con la inspección. El enfado y la indignación con el servicio eran comunes a todos ellos, así como la certeza de que se trataba de una costumbre. Este periódico trató de ponerse en contacto con Circuitv, la empresa concesionaria del centro de la ITV en Alzira „además de las de Gandía, Alcoi, Xàtiva, Ontinyent y Ondara„, para que ofreciese su versión, pero no hubo respuesta alguna.