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El Alzira se engrandece con Pau Quesada

El técnico de Cullera ha encarrilado la trayectoria del club hasta la zona noble de Tercera tras coger las riendas de la UD hace un año

Jugadores y cuerpo técnico que componen la plantilla de la UD Alzira para la actual campaña. KIKO FELGUERA

¡Cuánto puede cambiar la situación de un equipo en un año! Hace apenas trece meses, la directiva de la Unión Deportiva Alzira se veía obligada a prescindir de Fernando Gómez Colomer y confiaban el proyecto a un joven de 26 años, Pau Quesada. El técnico de Cullera se hacía cargo del primer equipo de un club de 96 años sin ninguna experiencia con un conjunto amateur. Los resultados con el fútbol base alzirista le avalaban: Campeón de Liga de Primera Regional con el Infantil A, con récord de puntos; mejor clasificación de la historia del Cadete A en Liga Autonómica, salvar al Juvenil A del descenso de Liga Nacional y ascenderlo la temporada siguiente a División de Honor. El pasado 25 de noviembre se cumplió un año desde que el Alzira juvenil batió el récord de puntos como debutante en División de Honor y llegó a ocupar la tercera posición. Al final se logró un sexto puesto que igualaba la mejor posición lograda por Dani Ponz en el Torre Levante y se salvaba el equipo con varias jornadas de adelanto.

Con el primer equipo vivió dos etapas bien distintas. Una primera de catorce jornadas en las que el cuadro alcireño salió desde la décimo séptima posición hasta encaramarse en la octava, quince puntos por encima del descenso. Fue el tercer mejor equipo en la clasificación parcial de ese tramo, a solo dos puntos de La Nucia y a ocho del todopoderoso Orihuela. «Fue una etapa muy bonita. Para mí era un sueño estar enfrentándome a equipos históricos del fútbol valenciano y una satisfacción que el equipo fuese tan bien. Llegamos a soñar que la promoción podría ser posible», indicó Quesada a Levante-EMV.

Un doloroso bache

Sin embargo, la derrota en Paterna fue el principio de una etapa aciaga que se confirmó con otra derrota en casa ante el Olímpic. En las últimas catorce jornadas, el Alzira solo sumó siete puntos, cayó hasta la penúltima posición parcial y a la décimo cuarta global, a solo cuatro puntos del descenso. Además, hubo otro enemigo en el tramo final. El posible descalabro de los cuatro equipos valencianos de Segunda B hacía pensar que hubiera arrastres de Tercera a Preferente que afectasen a los azlugrana, como así le sucedió en anteriores reestructuraciones de la categoría. «Lo pasamos muy mal. El equipo no iba y se desmoronaba moralmente con las sucesivas derrotas», añadió.

La directiva aguantó a Quesada en su puesto, conscientes de la debilidad de la plantilla, especialmente en ataque. Y porque su trabajo, tanto en categorías inferiores como en el primer equipo le avalaba.

El club hizo borrón y cuenta nueva. El cullerense, excelente conocedor del fútbol base valenciano, hizo un máster en futbolistas de Tercera y empezó bien pronto los contactos con los jugadores. De la anterior plantilla solo quedaron tres efectivos. «Aunque aumentamos el presupuesto, estamos lejos de otros equipos y debíamos adelantarnos a todos los que pudiéramos», explicó. Y vaya si se adelantó. El 20 de junio ya estaba firmado el 80 % de la plantilla con jugadores de renombre como Isaac, Nemesio, Boix, Abraham y Siscar. Después de un julio sin fichajes, agosto empezó con la guinda en defensa, el veterano Pepín. Después llegaron unos jóvenes jugadores que completaron la plantilla e incluso se han hecho un hueco como Santi. Tras una irregular pretemporada y la decepción de la Copa Federación, donde el Roda remontó un 3-0, empezó la liga y todo cambió.

Con un arranque fulgurante de ocho jornadas invicto el Alzira era segundo clasificado, el primero de la liga de los mortales. Desde que entró en la zona de promoción de ascenso a Segunda B en la jornada 6, no la ha abandonado aunque ha pasado una travesía por el desierto con cinco jornadas sin ganar.

Próximos duelos

El próximo rival de la UD Alzira será el Benigànim, un equipo íntegramente sub-23 conformado por miembros de Soccer Interaction, la sociedad que dirige la escuela Dragon Force del Oporto en Enguera que tomó el control del club en verano, cuando dimitió la directiva del club de la Vall d'Albaida. «No tenemos que confiarnos porque solo hayan ganado un partido de los últimos diez encuentros y esté en descenso». Para el técnico cullerense, eserá un duelo lleno de emociones: «Será especial reencontrarme con jugadores que tuve en el Juvenil el año pasado como Marcos, Lázaro y Bryan, que están siendo importantes para Rui Tomé». La victoria será importante ya que cuatro días después se visitará al líder, el invicto Alcoyano, y se cerrará el año recibiendo al Saguntino. El comienzo de 2020 estará marcado por los encuentros contra el Atzeneta de Albelda y el Roda, lejos del Suñer Picó.

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