La simbología nazi vuelve a campar a sus anchas en fachadas y mobiliario urbano de la Ribera. En esta ocasión, se ha detectado un incremento de pintadas con mensajes fascistas y esvásticas en la localidad de Benifaió, lo que inquieta a un sector de la población.

En un momento en el que la extrema derecha gana terreno en la política europea, también proliferan las pintadas con simbología ultra. En el caso de Benifaió, se ha detectado un incremento preocupante de grafitis en fachadas de viviendas o edificios abandonados, aunque también se pueden observar en señales de tráfico. «Putos rojos» o «Zona fascista» son algunos de los mensajes que aparecen junto a esvásticas, puntos de mira, el símbolo de las SS o el número 88, utilizado como abreviatura de la expresión «Heil Hitler» ya que la octava letra del alfabeto es la h.

El aumento de simbología que promueve el odio ha generado cierta inquietud en la población, según ha denunciado el Partido Popular, quien asegura haber recibido «muchas quejas» de sus vecinos. La formación conservadora ha expresado su malestar ante la aparición de «nuevas pintadas con simbologías nazis en distintos puntos de la población», que se suman «a las que ya existían».

De hecho, los populares sostienen que algunas de las pintadas más antiguas que se observan en la vía pública tienen, al menos, cuatro años. De igual modo, afearon al ejecutivo socialista su pasividad ante la proliferación de grafitis nazis por no dar «ninguna solución» ante un problema «que da mala imagen de nuestra población». Por último, el PP ha solicitado al ayuntamiento «que se haga cargo de quitar dichas pintadas, pues no son legales, han sido acciones vandálicas ajenas a los propietarios de las viviendas y no tiene porque hacerse cargo de dicho coste». Con todo, las administraciones públicas rara vez intervienen en desperfectos ocasionados en propiedades privadas. De hecho, en los últimos años se han realizado acciones promovidas por colectivos sociales o culturales para repintar aquellos espacios ensuciados por grafitis de simbología nazi.

El cerco judicial no frenó la proliferación en Carcaixent

Carcaixent es una de las localidades donde más pintadas nazis se han detectado en los últimos años. De hecho, pese a haberse identificado al presunto autor de unas mil, siempre aparece alguna nueva. La Fiscalía solicita para él tres años de cárcel y una sanción de 23.000 euros por un delito continuado de daños con el agravante de odio racista y antisemita. El ayuntamiento se personó en 2020 como acusación particular en la causa, que sigue abierta.