El Hospital de la Ribera busca fórmulas para ampliar el aparcamiento y el transporte público

Acudir con un vehículo privado al Hospital de la Ribera, aparcar en las inmediaciones del recinto sanitario y hacerlo en menos de cinco minutos es una de esas eventualidades que suceden una vez cada muchos años. La población ha normalizado un problema que los políticos de todos los colores han reconocido y se han comprometido a solventar, pero cuya solución jamás se ha ejecutado. Las palabras nunca se han transformado en hechos. La nueva gerencia del departamento de salud comarcal confía en que el enésimo intento por ampliar el número de plazas de estacionamiento sea el definitivo. 

Problema histórico

Según fuentes sanitarias, la máxima responsable del área sanitaria de la Ribera, Rosabel Ribes, se reunió con personal técnico de la Diputació de València y con la diputada del área de Proyectos, Reme Mazzolari, para abordar la situación de inundabilidad de la carretera CV-510 (Alzira-Corbera), principal acceso al centro hospitalario. Sin embargo, durante la sesión de trabajo se abordó también el histórico problema de aparcamiento.

Aparcar en el hospital de la Ribera es enfermizo

Aquella cita está llamada a ser la primera de muchas y se espera que en las próximas intervenga también el Ayuntamiento de Alzira. Alrededor del hospital hay no pocas parcelas que podrían albergar la más que necesaria ampliación de la zona de estacionamiento. Algunas son públicas, ya que pertenecen a la corporación provincial. Otras, en cambio, se encuentran en manos privadas. Las tres administraciones (Consell, Diputació y consistorio) tienen, por tanto, que acercar posturas y estudiar todas las fórmulas posibles para encontrar una solución a la precaria situación del aparcamiento. Y, lo más importante, aplicarla, ya que ningún gestor público lo ha hecho todavía.

Enlace directo con Renfe

La propia Ribes reconoció a Levante-EMV, poco después de conocer que sería la nueva gerente del Departamento de Salud de la Ribera, que la falta de plazas de estacionamiento era uno de los problemas más importantes del hospital. No en balde, afecta a diario a centenares de personas, tanto empleados como pacientes. 

Alzira proyecta un carril bici y un autobús lanzadera para ir al hospital

A la espera de que las partes actoras se pongan de acuerdo, dos de ellas (ayuntamiento y hospital) ya abordaron a finales del año pasado la posibilidad de habilitar un autobús lanzadera que uniese, en horas estratégicas, la estación de ferrocarril con el centro sanitario de forma directa, sin realizar apenas paradas en el casco urbano. Una propuesta, prometida por el gobierno municipal, que ofrecería un medio de transporte público que restaría tráfico y sería un complemento ideal a la necesaria ampliación del aparcamiento. Dos vías que, de avanzar en paralelo, aliviarían el caos circulatorio en el que se han convertido los accesos al hospital.