Un cuadro de Teodoro Andreu recupera su esplendor al cumplir 120 años

La restauradora del MUMA completa el trabajo de limpieza y consolidación de la obra del pintor alzireño titulada "Hortelano"

El cuadro de Andreu tras la restauración.

El cuadro de Andreu tras la restauración. / MUMA

El cuadro titulado «Hortelano» que el pintor alzireño Teodoro Andreu plasmara sobre el lienzo en 1904 ha recuperado todo su esplendor tras el proceso de restauración realizado en el Museu Municipal d’Alzira (MUMA). Se trata de una de las obras de la colección de autores valencianos de los siglos XIX y XX que el pintor local Salvador Ausina donó al museo y que recaló en la Sala Andreu al objeto de contextualizarla junto a otras obras del que fue el primer discípulo de Joaquín Sorolla.

El cuadro antes del proceso de restauración.

El cuadro antes del proceso de restauración. / MUMA

La intervención sobre el lienzo ha sido «compleja», explica la restauradora del MUMA, Mónica Ibáñez, que ha dedicado su tesis doctoral a la figura de Teodoro Andreu, «ya que la calidad técnica de la pintura y de la tela dejan bastante que desear», lo que ha obligado a realizar un doble trabajo de consolidación. El cuadro fue pintado hace ahora 120 años. Se da la circunstancia que también Sorolla plasmó en un dibujo a un agricultor con cierto parecido al de Andreu.

Tela de mala calidad

«Cuando se compró el cuadro ya habían corregido algunos desprendimientos repitando encima y tenía mucha suciedad superficial. La tela que gasta Andreu es de mala calidad y el óleo también. La tela presentaba unas ondulaciones y estaba muy destensada, tenía la película pictórica desprendida y con grietas», explica la técnica del MUMA.

Trabajos de consolidación de la pintura.

Trabajos de consolidación de la pintura. / MUMA

Mónica Ibáñez detalla que el proceso de restauración ha consistido en desclavar la tela del bastidor para realizar una limpieza, estucar las lagunas y, a continuación, realizar un trabajo de consolidación y reintegración cromática. «Como Andreu ahorraba mucho en tela, apuraba al máximo, y para poder tensar la tela sobre el bastidor también hemos tenido que colocar unas bandas perimetrales».

El MUMA se dispone ahora a restaurar el marco original.