Antifraude detecta irregularidades en la gestión de cobros del Ayuntamiento de Alginet

Una denuncia ante la Agencia Valenciana Antifraude presentada en el anterior mandato por presuntas irregularidades en la gestión recaudatoria de tributos municipales en el Ayuntamiento de Alginet y, en particular, por la prescripción «por dejadez de funciones del alcalde» de una deuda de un miembro del equipo de gobierno ha derivado en una investigación que ha permitido constatar la existencia de «anomalías, deficiencias e incumplimientos significativos» en la gestión tributaria y recaudatoria «con daño a la Hacienda local» ya que sólo en el año 2022 se dieron de baja por prescripción deudas por importe de dos millones de euros. 

Antifraude ha decidido trasladar al Tribunal de Cuentas el caso para que estudie si de estas irregularidades se pudiera derivar un menoscabo de los fondos públicos susceptible de generar responsabilidad contable ya que entre los antecedentes que obran en el expediente consta una advertencia de ese deficiente funcionamiento sin que se adoptaran medidas para corregirlo. Las conclusiones de la investigación también constatan «deficiencias e incumplimientos significativos» en la gestión de deudas a un teniente de alcalde que en la legislatura anterior contaba con dedicación exclusiva y cobraba del ayuntamiento y emplaza a la corporación reactivar el cobro de un capital principal de poco más de 1.800 euros.

José Vicente Alemany, del grupo independiente Socialistes d’Alginet (Sd’A), ostentaba la alcaldía en el anterior mandato como cabeza de un gobierno de coalición con el PP. La deficiente gestión en esta área municipal, no obstante, según se desprende del expediente elaborado, se arrastraba de años anteriores.

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Sin los medios necesarios

El informe de conclusiones de la Agencia Antifraude es una enmienda a la totalidad al servicio de recaudación del ayuntamiento que, entre los años 2019 y 2023, dio de baja por prescripción deudas por importe de 2.445.665 euros, si bien la mayor parte de ese cantidad corresponde al ejercicio 2022. Se trata de una cantidad muy elevada en un ayuntamiento con un presupuesto anual actualmente de doce millones de euros.

La resolución señala que el Ayuntamiento de Alginet cuenta con un modelo de gestión que implica la recaudación directa de sus ingresos «sin que debido a la especialidad que exige se hayan adoptado durante los últimos años las medidas organizativas y de funcionamiento necesarias que garanticen una estructura de recaudación propia, y la suficiencia y adecuación de los medios técnicos y personales destinados a la misma, así como a su seguimiento y control con real y potencial perjuicio económico para las arcas municipales; ya advertido por la tesorera municipal en noviembre de 2016», incide el informes. 

Incluso advierte de que las funciones de Tesorería las habría ejercido personal «sin los requisitos y cualificación técnica necesaria» en base a la normativa y que con las designaciones realizadas por la corporación de forma accidental se alteraban las condiciones «que permiten un adecuado ejercicio e independiente de las funciones reservadas» a las áreas de Intervención y Tesorería.

El informe advierte de que ha ejercido las funciones de Tesorería personal sin la cualificación necesaria

Por otra parte, Antifraude señala que no consta que el ayuntamiento disponga de un manual de procesos y procedimentos en el que se describan las funciones y responsabilidades de los empleados asignados al servicio de la Tesorería «que minimice las debilidades por las insuficiencias advertidas».

La resolución concluye con una serie de recomendaciones como la necesidad de reforzar con medios técnicos y humanos el área económica, con una adecuada cobertura de los puestos reservados a funcionarios con habilitación nacional, y la recomendación de que se recurra a una gestión delegada dada la especialización que se requiere.

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