Vox se queda solo en Montserrat en su intento de modificar el topónimo para incluir la forma en castellano

PP y Aigua, socios de gobierno del grupo de extrema derecha, votan en contra al considerar que no es un asunto que preocupe a los vecinos y que existen otras prioridades

El pleno rechaza la propuesta con los votos en contra también de PSOE y Compromís

Una rotonda de Montserrat con el topónimo en valenciano.

Una rotonda de Montserrat con el topónimo en valenciano. / Levante-EMV

El Ayuntamiento de Montserrat ha descartado tramitar la modificación del topónimo solicitada por el grupo municipal de Vox, que pretendía cambiar la forma única en valenciano Montserrat por una doble denominación que incorpore también el nombre en castellano. La formación de extrema derecha, que forma parte del gobierno municipal junto al PP y el grupo independiente Aigua, se quedó sola en la defensa de su propuesta en el pleno celebrado el jueves, mientras el resto de grupos municipales votaba en contra.

El alcalde de Montserrat, Sergio Vilar (PP), defendió que en la agenda de su grupo existen “otras prioridades” en las que centrar los esfuerzos y señaló que la discusión sobre el topónimo “es un debate que muchas generaciones jóvenes no entienden”. “No queremos abrir una pugna que cada cierto tiempo surge en algunos municipios, comprendemos la moción, pero no queremos generar un debate que distorsione los cambios que tratamos de aplicar desde el gobierno”, señaló.

"No quita el sueño a nadie"

Más firme si cabe se mostró el otro socio de Vox en el gobierno, el portavoz del grupo independiente Aigua, Vicente Belenguer, para argumentar su rechazo a la propuesta. “Que Montserrat sea con ‘t’ o sin ‘t’ no es un asunto que quite el sueño a los vecinos. No sé qué interés tienen en abrir un conflicto innecesario”, espetó Belenguer a los ediles de Vox, a los que afeó que trate de seguir las consignas de sus dirigentes. El edil de Aigua defendió que la forma Montserrat que rige desde 2005 está perfectamente consolidada y fue validada por la Acadèmia Valenciana de la Llengua y que en base a argumento sociales, filológicos e históricos “Montserrat es Montserrat”.

La concejal de Compromís Anna Campos replicó a Vox que presentara su propuesta como una cuestión de equidad lingüística cuando, en realidad, dijo se trata de una “sustitución lingüística” y defendió que el nombre del pueblo procede del latín y está inspirado en el relieve de su montaña por lo que “no tiene denominación histórica en castellano”. “No hay ninguna necesidad de traducir los topónimos a otras lenguas. Si se utilizó la forma Monserrat era porque durante muchos años el valenciano estuvo prohibido y perseguido”, indicó Campos, mientras señalaba que la moción lo único que buscaba era “dividir al pueblo y crear conflicto y odio”.

La concejal del PSPV Eva Bosch incidió en este argumentario histórico y rechazó, como llegó argumentar el concejal de Vox Juan José Martínez, que el topónimo Montserrat sea una imposición ideológica. “Regresar al topónimo sin “t” no es más que el fiel reflejo de la situación discriminatoria que ha sufrido la lengua, es blanquear una situación histórica en la que los niños no podían estudiar en valenciano y ni la gente expresarse en su lengua”, incidió Bosch.

Juan José Martínez defendió que su propuesta era "conciliadora y no discriminatoria".