Ayer arrancaba el año nuevo para el sector del motor de la ciudad de Gandia. Desde que se puso en marcha, en el 2012, la feria ha supuesto un punto de inflexión para las ventas. Y es que son muchos los que esperan este evento para decidirse a la adquisición de un vehículo. La política de los concesionarios de mantener las ofertas durante unas semanas también ayuda.

Los resultados de los últimos años han sido espectaculares para las empresas que participan habitualmente en la que es la iniciativa comercial más importante del año en la ciudad. Pero la Fira del Motor del 2019 arrancó ayer con un reto muy importante para los concesionarios: Igualar la facturación de la edición del año pasado, seis millones de euros.

Y es que, la feria de este año llega en medio del contexto de incertidumbre en el que se encuentra el sector, que acumula varios meses de descenso de las ventas. Ya lo dijo Víctor Moll, presidente de la asociación del motor de Gandia cuando presentó la feria hace un mes: lograr el mismo resultado que el 2018 ya se podría considerar un éxito.

Lejos del conformismo, los concesionarios se han movido para contrarrestar los resultados menos positivos que se están registrando en los últimos meses. La automatriculación es la gran protagonista de la Fira del Motor del 2019. Con esa estrategia, los concesionarios tienen más posibilidades de conseguir ventas y, además, poder ofrecer mejores precios a los clientes.

En un paseo por los estands que desde ayer están a pleno rendimiento en los 20.000 metros cuadrados de exposición al aire libre que se han habilitado una vez más en las principales calles del Centre Històric, se pudieron apreciar ofertas que superan los 10.000 euros en alguna de las marcas expuestas.

En la edición de este año participan un total de 58 marcas, dos más de coches y una de motos, que pondrán a disposición de los visitantes cerca de 600 referencias, con una apuesta importante por los últimos modelos.

Personal contratado por las empresas atenderá los más de 30 expositores instalados en la plaza Major, donde se encuentran las motos, la calle Duc Alfons el Vell, plaza del Tirant, paseo de les Germanies hasta el Teatre Serrano, plaza del Rei en Jaume I, calle Rausell y el Prado.

La Fira del Motor de Gandia ha crecido este año. Los comerciantes del Centre Històric han entrado en escena para ofrecer al visitante una experiencia completa. Elegir coche, comer en cualquier restaurante o tomar algo en alguna cafetería del centro de Gandia y rematar la jornada con una compra es posible este fin de semana, porque las tiendas asociadas abrirán a hoy de forma ininterrumpida y mañana hasta mediodía.

A mediodía de ayer tenía lugar la inauguración oficial. Como es tradicional, el punto de encuentro fue la puerta del ayuntamiento, donde la alcaldesa, Diana Morant, destacó la «oportunidad» que supone la feria para «renovar el parque automovilístico». «El reto de toda la ciudadanía es avanzar en las últimas tecnologías, por ello, tener ofertas de precios más asequibles abre esa puerta»,.

La concejala de Promoción Económica, Alícia Izquierdo, por su parte, también hacía hincapié en que «el gran éxito de la feria son los precios que se ofrecen en ella». Para la edila, «merece la pena visitar la Fira del Motor, porque se pueden adquirir vehículos a precios que no se encontrarán en ningún otro lugar».

«Lo mejor de la ciudad: el centro»

Izquierdo también destacó la colaboración del Centre Històric. «Cooperar entre todos los sectores hace de Gandia una ciudad competitiva respecto a otras». La concejala aseguró que la ciudad «pone lo mejor que tenemos: el Centre Històric, núcleo administrativo, patrimonial, comercial y gastronómico de la ciudad, que está al alcance de toda la feria».

Además del departamento de Promoción Económica que dirige Izquierdo, en la organización también participa la Concejalía de Servicios Básicos, porque «la gente no es consciente del trabajo que implica montar una feria de esta magnitud y de un producto como son los vehículos», señalaba Izquierdo, que agradeció el trabajo de todo el equipo que desde la administración local ha puesto su granito de arena.

La Fira del Motor de Gandia sirve cada año para medir el pulso de un sector que emplea a más de 1.200 personas de forma directa en la ciudad. Por esa razón, el ayuntamiento se vuelca con el evento cada año. Desde que se inició hasta ahora, el crecimiento en la facturación ha sido constante.