Un informe elaborado por el jefe del parque de bomberos de Gandia, Álvaro Tur, al que ha tenido acceso Levante-EMV, advierte de que la urbanización Monterreal, ubicada en este término municipal, es un auténtico polvorín y precisa de medidas urgentes para paliar los riesgos que podrían generarse ante un posible fuego. Para ser más concretos, en caso de que se produjera un incendio forestal en la zona, señala el escrito, las condiciones en las que actualmente se encuentra no solo agravaría sus efectos, sino que dificultaría notablemente su extinción por parte de los equipos de emergencia.
El informe fue redactado a instancias de un vecino de la zona, que anteriormente ya había remitido solicitudes al propio consistorio alertando de la situación, pidiendo que limpiaran la urbanización, aunque, según denunciaba, no había obtenido respuesta. El documento, que tiene registro de entrada en el Ayuntamiento del Real de Gandia el pasado 11 de octubre, revela que en el mes de junio del 2018 se realizó un simulacro de incendio con el objetivo de estar preparados para actuar, especialmente en lo que respecta a la protección de las viviendas. Durante la prueba se hallaron dos deficiencias importantes. Por una parte, que «el caudal de abastecimiento de agua para los camiones de bomberos desde los hidrantes de la urbanización es insuficiente», señala el informe. Ante esta carencia, indica, «el abastecimiento debería ser desde las piscinas de las viviendas». En segundo lugar, se alertó de que «la masa de matorral y forestal que está dentro de la urbanización debe tener una limpieza periódica para evitar una continuidad del incendio y evitar que se propague con peligro hacia las viviendas». A su vez, alerta de que «la carga térmica que se produciría sería más peligrosa».
Más de un año después, la situación apenas ha variado. El mismo informe, que ha sido remitido al Ayuntamiento del Real de Gandia, revela que el pasado 23 de septiembre se llevó a cabo una nueva revisión. Entonces, se observó que «la masa forestal necesita de una limpieza importante» y advertía de que, como 15 meses antes, «el caudal de los hidrantes sigue siendo insuficiente».
Así, el jefe del parque de bomberos de Gandia insta al Ayuntamiento del Real o de «el organismo que considere necesario» a que «realice una limpieza del matorral y la masa forestal para evitar la propagación de un posible incendio forestal».
Limpieza de Divalterra
El alcalde del Real de Gandia, Gustavo Mascarell, por su parte, explicaba ayer a Levante-EMV que las deficiencias detectadas en los hidrantes se limitaban «a la ausencia de un pequeño tubo, que no se encontraba» y que esta cuestión «ya estaba solucionada» por parte de Egevasa (gestora del agua) y con el visto bueno del perito». Además, Mascarell recordaba que los hidrantes de Monterreal «fueron instalados a raíz del plan de autoprotección contra incendios, que estuvo coordinado por los propios bomberos».
Respecto a la cuestión de la limpieza, el alcalde asegura que las brigadas de Divalterra realizan esas labores cada año. «Cuando acaban el trabajo ya solicitamos los del año siguiente», lo que demuestra, según Mascarell. «Es cierto que los recursos son menores de lo que nos gustaría. También que siempre vienen en verano, cuando se producen mayoritariamente los incendios y nosotros quisiéramos que vinieran durante el invierno, pero se está encima de la cuestión», indicaba.
A su vez, Mascarell advertía que el trabajo de limpieza del monte no pasa solo por las administraciones, sino que también es necesaria la implicación de los propietarios para que las parcelas estén en condiciones adecuadas. Y es que, un jardín descuidado es tanto o más peligroso que el monte.
