La labor realizada por una patrulla de la Guardia Civil Fiscal y de Fronteras, otra de la Policía Local de Gandia y finalmente efectivos sanitarios del SAMU lograron salvar la vida a hombre de 60 años, vecino de Gandia, que sufrió un aparatosa caída seguida de parada cardiorrespiratoria en un conocido bar y restaurante del Grau.
Según señalan testigos presenciales, el hombre, de complexión corpulenta, se precipitó por el hueco de las escaleras que conducen a los aseos del establecimiento, golpeándose violentamente en la cara y en otras partes del cuerpo. Seguramente a consecuencia del impacto, que le rompió varios dientes y generó una abundante hemorragia en la boca, sufrió una parada cardiorrespiratoria.
Una patrulla de la Guardia Civil Fiscal y de Fronteras acudió inmediatamente a la llamada de socorro y, tras inspeccionar y sacar al herido del foso en el que se encontraba, comenzaron a practicarle maniobras de recuperación, que se prolongaron durante más de diez minutos. Pasado ese tiempo, y cuando ya parecía que se recuperaba, la labor siguió por parte de agentes de la Policía Local de Gandia, hasta que llegó la unidad del SAMU con el personal sanitario. Los médicos señalaron la importancia de la atención recibida inmediatamente para que el hombre salvara la vida.
Los hechos sucedieron a eso de las 6 de la tarde del pasado viernes y llamaron la atención de numerosas personas. Hasta el lugar de los hechos se personaron familiares del hombre, que fue trasladado urgentemente al hospital Francesc de Borja, donde quedó ingresado.
Una enseñanza para la vida
Sucesos de este tipo, con personas de todas las edades, son muy frecuentes, y en los últimos años ha aumentado considerablemente el número de personas que consigue recuperarse gracias a la labor realizada por quienes conocen y han realizado prácticas de reanimación.
Guardia Civil, policías Nacional y Local o Cruz Roja de Gandia acumulan muchas de esas actuaciones que, a veces, se mantienen durante horas para tratar de evitar la muerte de la víctima.
Actuación de la Cruz Roja
Por otra parte, los miembros de Salvamento y Socorrismo de la Cruz Roja que vigilan la playa de Gandia detectaron a una víctima pasiva, de unos 40 años de edad, y rápidamente acudieron a atenderle junto con el equipo médico y sanitario.
La víctima, al parecer, había sufrido un infarto por lo que le practicaron las primeras maniobras logrando, tras emplearse a fondo, estabilizarlo. Una ambulancia del SAMU que trasladó al bañista hasta el Hospital Francesc de Borja, donde quedó ingresado.
