El Grupo DIA, que gestiona la marca de supermercados del mismo nombre, espera poder retirar en los próximos días la gran cantidad de productos alimentarios que quedaron almacenados en el establecimiento de la calle Lector Romero tras el derribo del techo ocurrido el pasado mes de abril y que obligó a su cierre. Es la respuesta que la empresa ha dado a este periódico después de que el concejal Pascal Renolt hiciera llegar, a través de un comunicado, las quejas de algunos vecinos, acompañadas de fotografías que aseguraban haber visto ratas en la zona que, supuestamente, acudirían a buscar la comida que no fue retirada en su momento.
El suceso tuvo lugar el pasado mes de abril, por lo que han pasado ya mas de cinco meses sin que la firma haya procedido a retirar la parte de los alimentos que se encuentran al menos en la zona donde se el techo se vino abajo. Renolt recuerda que, entre medias, ha pasado un verano con sucesivas olas de calor que han elevado de forma muy importante las temperaturas, lo que acelera la putrefacción de los alimentos, que además tampoco han estado expuestos a las condiciones ambientales que normalmente hay en este tipo de tiendas y que también permiten la conservación de los alimentos.
En las imágenes se ven especialmente cajas de galletas y otros dulces que se mantienen en su envase y colocadas en los lineales como estaban el día en que la cubierta se vino abajo.
Desde la empresa señalan que "se están tramitando los permisos para acceder al inmueble y proceder a la retirada de producto". Añaden, a su vez, que la causa de esta demora es que "se trata de un local ajeno a la propiedad de DIA", según apuntan en su comunicado. "Esperamos resolver la situación en el menor plazo posible y evitar más perjuicio al barrio".
El concejal también ha pedido al Gobierno local que actúe para evitar posibles molestias a los vecinos y las vecinas de la zona en caso de que se demore el trabajo de la empresa en la retirada de los productos almacenados.
