Un juzgado de Gandia libra a una mujer de pagar una deuda de 29.000 euros

El procedimiento se ha llevado a cabo mediante la aplicación de la ley de segunda oportunidad

T.Á.C. Gandia

El juzgado de primera instancia número 5 de Gandia ha perdonado a una mujer una deuda con las entidades bancarias que ascendía a 29.000 euros en base a la llamada ley de segundas oportunidades.

La afectada, que ha sido defendida por el despacho Repara tu Deuda Abogados, había contraído esa deuda al solicitar créditos bancarios para cubrir tanto sus gastos personales como para ayudar a su madre, de la que tenía que hacerse cargo debido a que sufría una enfermedad crónica. La deudora, según explica la firma que ha llevado el caso, «estaba en una situación de insolvencia al no poder asumir sus obligaciones».

La mujer, según explican, además de tener que hacerse cargo de su madre enferma vivió largos periodos de bajas laborales, lo que le impedía hacer frente a la devolución de los créditos «y la llevaron a la situación de sobreendeudamiento».

El despacho de abogados puso en macha el proceso para que se le aplicara el llamado beneficio de exoneración del pasivo insatisfecho, ya que sobre ella pesaba un concurso de acreedores personal.

Tras estudiar el caso, el juzgado comprobó que la mujer cumplía con todos los requisitos para ser exonerada de la deuda, entre ellos que la deudora «debe calificarse de buena fe», que es persona natural, que no ha sido condenada por ningún delito fiscal o que se ha intentado un acuerdo extrajudicial de pagos, que no han sido satisfechos. Además, la mujer tampoco dispone de bienes suficientes para ello.

En la sentencia, a la que ha tenido acceso Levante-EMV se aprecia que ninguno de los acreedores presentó alegaciones contra la decisión de declarar concluso el concurso, lo que facilita el trámite y, al final, libera a la mujer de tener que pagar una deuda de 29.000 euros a la que no podía hacer frente.

España aprobó la Ley de Segunda Oportunidad en el año 2015. Se trata de una legislación nacida hace 100 años en Estados Unidos con el espíritu de ofrecer una segunda oportunidad a todos aquellos que han sufrido algún tipo de contratiempo económico.

Esta legislación permite la exoneración de la deuda de particulares y autónomos siempre que se demuestre previamente que el deudor ha actuado de buena fe o que el importe debido no supere los 5 millones de euros.