El Golfo de Tavernes empieza a despegar

Casi el 88% del área es propiedad de Alpesa y Clave Denia

La calle Golfo, del polígono del mismo nombre, que pasará a formar parte de la gran manzana industrial del polígono. | LEVANTE-EMV

La calle Golfo, del polígono del mismo nombre, que pasará a formar parte de la gran manzana industrial del polígono. | LEVANTE-EMV / Toni Álvarez Casanova. Gandia

Toni Álvarez Casanova. Gandia

El ayuntamiento de Tavernes de la Valldigna dará el próximo lunes, si no ocurre algún imprevisto, el primer paso para aprobar una modificación urbanística en el polígono industrial El Golfo, ubicado a menos de un kilómetro de la playa, para facilitar la implantación y crecimiento de empresas en la localidad.

Mandriladora Alpesa y Clave Denia (Ale Hop) han presentado ante la administración local un Proyecto de Reforma Interior (PRI), que contempla la eliminación de una calle que separa cinco parcelas que son propiedad de ambas mercantiles y, además, permitirá ampliar el vial perimetral que quedará alrededor de la manzana central para mejorar la movilidad de las empresas y de los vecinos y vecinas que acuden a la estación de Renfe, ubicada en el mismo espacio. El objetivo de esta propuesta es dar una solución a las necesidades de las empresas, lo que «en cualquier caso redundará en la generación de actividad económica para el municipio de Tavernes», según se expresa en el documento, al que ha tenido acceso Levante-EMV.

Estas dos firmas son propietarias de casi el 88% del total de la superficie industrial de este polígono y sus parcelas ocupan la parte central, aunque están separadas por un vial, la calle Golfo. Esa configuración impide que puedan ampliar sus instalaciones en el caso de Alpesa y construir una nave única como tiene previsto Clave Denia, que pretende implantra en la ciudad un centro logístico y un espacio de I+D+I.

Por ese motivo representantes de las dos empresas hace ya varios años que se pusieron en contacto con el ayuntamiento para valorar la posibilidad de llevar a cabo esa modificación que permita privatizar la calle que separa los terrenos. De hecho, la adquisición de la empresa de la Marina en 2019 estuvo supeditada al compromiso municipal de que se llevaría a cabo ese cambio.

El trabajo iniciado en la pasada legislatura con el entonces concejal de Urbanismo, Josep Llàcer, ha continuado en los últimos meses con el actual responsable, Juan Bautista Talens, para, por fin, poder empezar la tramitación de forma oficial.

El primer paso es la aprobación del proyecto por parte del pleno, algo que presumiblemente ocurrirá el próximo lunes para, posteriormente, informar a la Generalitat. Si no hay ninguna cuestión que resolver, la respuesta se espera que sea rápida por parte de la administración autonómica para que regrese al ayuntamiento y que, finalmente, dé luz verde.

Para llevar a cabo la tramitación, las dos empresas se han conformado en Asociación de Interés Urbanístico con el objetivo no solo para promover ese proyecto sino también para, posteriormente, hacer frente a las actuaciones que sean necesarias una vez realizada la reparcelación.

La nueva manzana abarcará un total de 106.296 metros cuadrados, de los que 97.438 son edificables. Dentro de este espacio quedarán cinco parcelas. La más grande es la que alberga las instalaciones principales de Alpesa, con una superficie de 32.300 metros cuadrados. A esta se suman otras de 26.921, 15.599,12.430 y una última de 7.932. A estas se sumará la calle El Golfo, que pasará a ser un espacio privado que, posteriormente, en la reparcelación que lleve a cabo la Asociación de Interés Urbanístico, se repartirán las empresas en una negociación que cerrarán entre ambas mercantiles.

A cambio de convertir el citado vial en un espacio privado, el ayuntamiento recibirá una parcela de carácter dotacional de algo más de 7.000 metros cuadrados en el mismo polígono, que ahora mismo es propiedad de una de las dos firmas.

Con esta actuación se ampliará el vial que quede en el perímetro de la manzana, donde se habilitará también un carril ciclopeatonal, aumentará la superficie de zonas verdes y también se implantarán un mayor número de plazas de aparcamiento, tanto para turismos como para vehículos pesados.