Gandia rechaza prolongar la ZAS en la plaza del Castell playa pero mantendrá medidas antirruido

El consistorio rechaza las alegaciones de los edificios Gardenias y asegura que llevará a cabo inspecciones para asegurar el descanso de los vecinos

Casi todos los locales de ocio han cerrado y las mediciones certifican que el nivel sonoro es mínimo

Para certificar el fin de la ZAS el ayuntamiento tomó 40.000 registros de ruido entre el 14 de julio y el 11 de gosto

Edificios de viviendas en los alrededores de la plaza del Castell de la playa de Gandia.

Edificios de viviendas en los alrededores de la plaza del Castell de la playa de Gandia. / Levante-EMV

Sergi Sapena

El Ayuntamiento de Gandia va a mantener la decisión de suspender la declaración de Zona Acústicamente Saturada (ZAS) para el espacio urbano de la playa conformado por la plaza del Castell y varias de sus calles adyacentes. A diferencia de lo que ocurría cuando aquello era un bullicio de locales nocturnos, la mayoría de establecimientos cerraron y, como certifican las mediciones realizadas por los técnicos, el nivel sonoro ahora es similar al de otras áreas urbanas. En todo caso, sin que se superen los niveles legales en horario diurno y nocturno.

La declaración de ZAS para la plaza del Castell y alrededores se adoptó el 29 de septiembre de 2019, lo que supuso serias restricciones de tráfico, prohibición de terrazas, límites a la implantación de locales y reducción del horario de apertura de los mismos. Aquellas medidas tuvieron efecto y por eso el pasado mes de septiembre el ayuntamiento optó por abrir un proceso de información pública para dejar sin efecto la ZAS.

Sin lugar a dudas, lo que más ha contribuido a la normalización sonora de ese lugar ha sido el cierre de locales de ocio. La mayoría de los que hubo han desaparecido y los pocos que quedan allí o en calles cercanas disponen de dispositivos para que el ruido no llegue al exterior.

Las mediciones sonoras realizadas por técnicos municipales entre el 14 de julio y el 11 de agosto del año pasado, en pleno verano, revelan que, en horario nocturno, no se excedía de los niveles legales. El informe fue remitido a la dirección de Calidad Ambiental de la Generalitat, que también avaló el levantamiento de la declaración de ZAS.

El análisis acústico se llevó a cabo de forma concienzuda, con tres equipos de medición preparados para registrar los niveles sonoros cada minuto a una altura de de entre 6 y 8 metros, lo que supuso, al final del operativo, cerca de 40.000 registros acumulados entre las 12 horas del 14 de julio y las 7 horas del 11 de agosto.

Aun así, quienes se opusieron al levantamiento de la ZAS fueron los vecinos de las comunidades de tres edificios, Gardenias I, II y III, que, curándose en salud, exigían seguir con la ZAS por temor a que si se levantan las medidas restrictivas que conlleva puedan volver a sufrir las molestias de antaño.

Sin unanimidad en el pleno

El Ayuntamiento, sin embargo, ha rechazado esas alegaciones, pero responde a los vecinos que va a permanecer vigilante aunque la ZAS desaparezca como medida jurídica. Así el Gobierno local ha ratificado la prohibición de instalar máquinas expendedoras y quioscos en la zona, se intensificarán los controles de la Policía Local para regular el tráfico y se adoptarán «cuantas medidas se vean adecuadas» para reducir el nivel de ruido.

La decisión de suprimir la ZAS de la plaza del Castell y sus alrededores contó con el voto a favor de los dos grupos que integran el Gobierno local, PSPV y Compromís, mientras que los concejales de la oposición de PP y Vox se abstuvieron.