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Al oír la palabra "migraña", la mayoría de la gente piensa inmediatamente en un dolor de cabeza, pero el dolor de cabeza es sólo uno de los síntomas que caracterizan a la migraña, que es una enfermedad neurológica del cerebro. Según la definición de la Asociación Española de pacientes con Cefalea (AEPAC), la migraña es un dolor de cabeza intermitente, pulsátil, que aparece principalmente en un lado de la cabeza, de intensidad moderada a grave, y que puede empeorar al realizar alguna actividad física.
La migraña es una enfermedad neurobiológica y entre sus síntomas se pueden incluir náuseas y vómitos, sensibilidad extrema a la luz (fotofobia), el sonido (fonofobia) y los olores (osmofobia) y, en algunos casos, trastornos de la visión, como destellos, luces, puntos ciegos y líneas brillantes que atraviesan en zigzag el campo visual. Estos trastornos de la visión de denominan "aura" y aparecen en aproximadamente el 15% de los migrañosos.
Las migrañas son tres veces más frecuentes en las mujeres que en los hombres. Se calcula que hoy en día, el 18% de las mujeres, el 6% de los hombres y un número cada vez mayor de niños sufren de migraña.
Dificulta la rutina
Las migrañas afectan negativamente a las personas, a su vida privada y a su trabajo. Según la Organización Mundial de la Salud, la migraña es una de las enfermedades que mas dificulta para tener un ritmo de vida normal. Sin una terapia adecuada, el trabajo debe pararse durante horas o incluso días a raíz de los dolores y de los efectos secundarios.
Los dolores de cabeza no son más que un síntoma, "la migraña es una de las afecciones más dolorosas y más frustrantes de la medicina. Las personas afectadas ven su migraña como malévola, destructiva de la calidad de vida, costosa, fatigante y humillante" destaca AEPAC.
Las crisis de migraña pueden durar varios días y, en muchos casos, los episodios agudos sólo responden al tratamiento cuando el paciente descansa en una habitación a oscuras. Las actividades, tanto profesionales como particulares, tienen que cancelarse inesperadamente, lo que puede provocar sentimientos de culpabilidad.
Causas y diagnóstico
La migraña se desencadena ante determinados componentes que aumentan los síntomas de la enfermedad. Si se producen algunos cambios en el ritmo de sueño, en la dieta alimenticia, cambio de ciclo hormonal, se llevan a cabo mudanzas, cambio en la vida profesional, o se hace esfuerzo físico pueden sufrirse migrañas. Del mismo modo que comer ciertos alimentos o beber bebidas alcohólicas puede tener repercusiones graves en el bienestar de la persona.
No hay dos pacientes de migraña iguales, razón por la cual existen distintas formas de tratar la enfermedad. Entre los posibles tratamientos existen Medicamentos sin receta que suelen ser eficaces para algunas personas como el ibuprofeno, el paracetamol y la cafeína. Los medicamentos con receta son antimigrañosos más específicos como la codeína, un opiáceo débil que los hace mucho más potentes. Las pastillas, supositorios o inyecciones, son también muy eficaces en el tratamiento de las crisis agudas de migraña, aunque muchas personas experimentan graves efectos secundarios, como náuseas y mareos.
También están los medicamentos creados para tratar específicamente las migrañas, los triptanes. Estos medicamentos se pueden compaginar con la ingesta de medicinas contra las náuseas u otros métodos no farmacológicos.
Día contra la Migraña
El Día de Acción contra la Migraña tuvo lugar el pasado domingo y para conmemorar esta fecha, la European Headache Alliance (EHA) organizó un encuentro donde se soltaron 80 globos en la Grande Place de Bruselas, representando a los 80 millones de pacientes que sufren esta enfermedad en Europa.
Esta asociación ha elaborado el "Manifiesto de Madrid sobre Dolor de cabeza y Migraña" que sigue los protocolos precedentes de las Declaraciones de Roma y Amsterdam. El manifiesto supone un llamamiento para hacer de la investigación de esta enfermedad una prioridad porque la migraña es un desorden neurológico del cerebro, que está reconocida por la Organización Mundial de la Salud como la 12ª causa de discapacidad y que supone un coste para la economía europea de 27 billones de euros al año.
Y es que la migraña es una enfermedad que afecta a más de 80 millones de personas en Europa y a 1.600.000 en España. De ahí la necesidad de llevar a cabo políticas de actuación de forma conjunta entre todos los países.
