El hombre que degolló el jueves a su madre en Aldaia, Juan José R.P., ingresó ayer en prisión tras pasar a disposición judicial en Torrent durante la mañana. Así, el Juzgado de Instrucción número dos del citado municipio decretó prisión provisional comunicada y sin fianza. La causa está abierta por un supuesto delito de homicidio y robo con violencia.

Juan José, de 40 años, y vecino del barrio Socusa de Alaquàs llegó a primera hora de la mañana a Torrent en un vehículo de la Policía Nacional, antes de las 10 horas. Estuvo toda la mañana en el edificio de los juzgados, hasta poco antes de las 14 horas, cuando salió esposado y acompañado por dos agentes de la Policía Nacional. No tapó su rostro a la cámara de este diario y sólo agachó la cabeza, con un gesto entre tenso y apenado.

Justo antes de ser introducido en el vehículo policial, los periodistas le preguntaron en dos ocasiones: «¿Te arrepientes de lo que hiciste ?». No dijo nada, sólo pareció murmurar alguna palabra mientras comenzaba a llorar sin mirar en ningún momento a quienes le lanzaban la cuestión.

Su crimen fue arrebatarle la vida a su madre, Eugenia Peñalver, de 66 años, que como informó este periódico recibió una gran herida de arma blanca en el cuello. El hombre había acudido a la vivienda de Aldaia, donde su madre trabajaba como asistenta, con la intención de robar. Sin embargo Eugenia se opuso y su hijo respondió brutalmente. Había aparecido en la casa disfrazado con un gorro, una braga, guantes de lana y un chaquetón. Se llevó un pírrico botín que consistía en un ordenador portátil y unos petardos.

Un vecino dio aviso a la policía tras oir los gritos de la víctima y seguir al agresor nada más salir del inmueble. Según este vecino, el parricida dejó la escena del crimen tranquilamente hasta que fue abordado. Entonces echó a correr, pero no llegó muy lejos, ya que la policía le interceptó cerca de su domicilio.

La exmujer de Juan José contó en exclusiva a Levante-EMV que se separó porque su adicción a la cocaína le había vuelto muy violento. De hecho intentó atropellarla con el coche. Según la mujer, Eugenia llevaba años dando dinero a su hijo, quien se negó a recibir rehabilitación.