La Policía Nacional ha logrado desarticular un grupo organizado que se dedicaba a comprar droga en países de América del Sur para traerlos a España mediante «mulas», para luego distribuirla. En esta operación, los agentes detuvieron a cuatro personas en Gandia y otras dos en Madrid. Asimismo, durante la investigación se llevaron a cabo registros domiciliarios en varios municipios de la Comunitat Valenciana.

Los detenidos son cuatro hombres y dos mujeres, a los que se les acusa de pertenecer a un grupo criminal y cometer un delito de tráfico de drogas. La policía les ha intervenido cuatro kilos y medio de cocaína, más de 28.000 euros así como diversa documentación.

Los agentes comenzaron las investigaciones cuando tuvieron conocimiento que al parecer una red utilizaba personas, llamadas «mulas», para traer cocaína escondida.

Así, consiguieron dar con la organización y averiguaron que cada miembro de la misma contaba con una función determinada. Uno de los detenidos tenía los contactos en los países americanos, mientras que otro de ellos se encargaba de buscar a las personas que actuarían como mulas, lo cual se hace habitualmente a cambio de un pago.

Un acompañante en el viaje

Del mismo modo, había otro miembro que acompañaba a las mulas en el viaje y les asesoraba sobre cómo se tenían que comportar en los puestos fronterizos para evitar ser descubiertos por las fuerzas de seguridad.

Durante la investigación supieron que se estaba preparando uno de estos viajes por lo que los policías establecieron un dispositivo de vigilancia en el aeropuerto Adolfo Suárez-Barajas de Madrid para detectar a la «mula» que presuntamente llegaría con un paquete de droga.

Así fue, en el aeropuerto los agentes detectaron a un sospechoso al cual tras un registro se le localizaron cuatro kilos de cocaína que llevaba adosados a los muslos y a los gemelos, junto al acompañante de la organización. Ambos fueron detenidos.

Como consecuencia de las investigaciones, los agentes detuvieron en Gandia al resto de miembros del grupo, acusados de pertenencia a grupo criminal y delito contra la salud pública. Además, la policía realizó tres registros domiciliarios en Ador, Gandia y Guardamar, donde localizaron otro medio kilo de cocaína, así como 28.420 kilos, dos básculas de precisión y diversa documentación.

De los detenidos,—dos de ellos con antecedentes policiales— cuatro ingresaron en prisión tras pasar a disposición judicial. Los otros dos detenidos fueron puestos en libertad, si bien deberán comparecer en el juzgado cuando les sea requerido.