La alquería Falcó, una de las joyas patrimoniales de Torrefiel de titularidad municipal, será objeto de una rehabilitación integral para destinarla a centro de atención a personas con discapacidad intelectual. Un nuevo recurso que contará con 40 plazas de atención integral a personas de entre 16 y 65 años. Así lo han anunciado hoy en rueda de prensa las concejalas de Contratación, Lluïsa Notario, y Vivienda, Isa Lozano. Será el segundo centro de estas características en la ciudad y en el mismo habrá unidades específicas para la atención a personas con autismo (TEA), demencia y trastornos de conducta. Se trata de un recurso muy demandado que la concejalía de Notaria tratará de agilizar al máximo y para ello los servicios municipales serán los responsables directos de la redacción del proyecto. Notario no quiso con todo concretar plazos del inicio de las obras y de la puesta en funcionamiento de este nuevo centro asistencial.
Lozano ha subrayado que “la ciudad tenía, y tiene, una necesidad evidente de disponer de un centro de día para personas con discapacidad intelectual, especialmente para personas que tienen un grado severo y profundo”.
La concejala ha explicado que el centro incluirá atención psicológica, laboral y familiar además de actividades de fisioterapia, animación sociocultural, promoción de la salud y talleres, entre otras. Además, ofrecerá servicio de comedor y transporte. La alquería dispondrá también de una zona de recreo exterior con huertos urbanos.
La Alquería Falcó, por la que el ayuntamiento pagó un millón de euros, ha sido ya objeto de una intervención previa de consolidación estructural y de un completo estudio arqueológico en el que se recuperó, bajo la fachada principal, una lápida funeraria romana íntegra que se considera una pieza única. La intervención arqueológica ha permitido determinar el origen medieval de esta alquería, destacada por su torre de "perdigones" única en la Comunitat Valenciana. Los arqueológos han localizado fragmentos de cerámica del siglo XI en la alquería así como los restos del reloj de sol.
La intervención, ha explicado Notario, será similar a la que se ha hecho ya a través de su concejalía en la Alquería del Moro, uno de los edificios permutados con el Valencia CF, y en el chalé de Aben Al Abbar, adquirido este último en 2009 por el ayuntamiento.
La alquería Falcó se recupera así para nuevos usos, tal como está previsto hacer con el Casino del Americano, en Benicalap. Esta villa indiana única se reconvertirá en una Escuela de Agricultura, sin embargo, el proyecto de rehabilitación, que incluye una nueva construcción en el jardín, lleva meses bloqueado
