El hombre de 90 años que falleció el lunes por la tarde mientras comía en un establecimiento de comida rápida de Gandia murió por obstrucción de las vías respiratorias atragantado con un trozo de carne, según confirmó ayer la autopsia practicada al cadáver en el Instituto de Medicina Legal de Valencia.

Los hechos, de los que informó en exclusiva Levante-EMV, se produjeron en torno a las dos de la tarde del lunes en un restaurante de comida rápida de Gandia, en el que se encontraba el anciano en compañía de unos familiares. Cuando el hombre estaba comiendo empezó a toser y a encontrarse indispuesto. Pese a las maniobras para reanimarle el nonagenario falleció en el lugar. Cuatro horas después se procedió al levantamiento del cadáver. Todo apuntaba a un posible atragantamiento como causa del fallecimiento, hecho que confirmó ayer la autopsia.