Aarón Vidal López, un joven valenciano de 25 años con una prometedora carrera como militar, falleció ayer tras sufrir un aparatoso accidente en la base española en Iraq, donde estaba destinado en la que era su primera misión en el extranjero. El soldado, vecino del barrio valenciano de Malilla, se encontraba junto a otros dos compañeros, que resultaron heridos, en un vehículo Lince -un 4x4 polivalente, blindado y con torreta- cuando, a la altura de la entrada de la base, un camión aljibe militar de las Fuerzas Armadas iraquíes colisionó con su vehículo.
Debido a la colisión, el joven militar, que estaba situado en la torreta, salió despedido y fue atropellado por el camión causante del propio alcance, según indicaron fuentes del Ministerio de Defensa. La base española donde se produjo el accidente que le costó la vida a Aarón Vidal y en el que resultaron heridos otros dos militares españoles está situada en la localidad de Besmayah, a 40 kilómetros de Bagdad.
Aarón Vidal era miembro del Regimiento de Caballería Ligero y Acorazado «Lusitania» número 8, desplegado en Iraq como participante en la Operación Inherent Resolve. Su misión, la primera en el extranjero desde que entró en el ejército español en 2009, consistía en el adiestramiento de las fuerzas armadas iraquíes, integrada en la Coalición Internacional contra el grupo terrorista Estado Islámico.
El Ministerio de Defensa ha abierto una investigación para aclarar las circunstancias del accidente y han dado indicaciones a las autoridades iraquíes para que procedan a actuar con respecto al conductor del camión, quien ha sido detenido, aunque nada hace pensar en un atentado, señalaron fuentes de Defensa.
Primer fallecido desde 2004
Los restos mortales del valenciano serán trasladados a lo largo del día de hoy a España. Asimismo, los otros dos heridos, identificados como el cabo Felipe Capa Medina y el soldado Jesús Ángel Alacid García, permanecen en observación y su estado no reviste gravedad. Esta muerte se suma a la de otros diez españoles, entre diplomáticos, agentes del CNI y militares, que han perdido la vida en Iraq desde 2003, aunque se trata del primer fallecido desde que España regresó a ese país tras haber retirado las tropas en 2004.
