Agentes de Aduanas y de la Guardia Civil confiscaron el pasado día 13 el mayor «gancho perdido» de los incautados hasta la fecha en el puerto de València: 702 kilos de cocaína distribuidos en 28 mochilas que los narcos colaron en un contenedor procedente de Panamá. El decomiso no ha generado ninguna detención.

La droga llegó al puerto valenciano a bordo de un buque que trajo la carga desde Panamá. Según ha podido saber Levante-EMV, las 28 bolsas con droga fueron cargadas dentro de un contenedor que traía bombonas de gas vacías para una empresa valenciana ajena al narcotráfico.

De hecho, como sucede en todos los «ganchos perdidos», los traficantes utilizan cargas de mercancía legal, normalmente de empresas con un alto volumen de tráfico comercial para evitar suspicacias y minimizar las posibilidades de inspección, para colar en ellas grandes cargamentos de cocaína.

Hasta ahora, el mayor gancho perdido detectado en València era de 563 kilos de cocaína.

La droga fue detectada gracias al trabajo de la Unidad de Análisis de Riesgo (UAR), integrada por Aduanas y la Guardia Civil, que revise diariamente decenas de contenedores en función de una serie de parámetros como el origen, los puertos intermedios o la carga.