Han pasado siete meses, pero la Guardia Civil no dejó caer la investigación en el olvido. Agentes de policía judicial de Cullera han arrestado a un hombre de 26 años y sin antecedentes previos por la violación de una mujer de 64 en un garaje de Carcaixent, municipio al que la víctima había acudido porque estaba en fiestas. El acusado, que según fuentes jurídicas declarará hoy ante la jueza que instruye la causa, fue apresado este martes en el municipio de la Ribera donde reside y trabaja.
Los hechos sucedieron en diciembre pasado, durante una celebración festiva que reunió a personas de distintos puntos de la Ribera e incluso de València.
El ahora detenido, de 26 años, aprovechó el momento en que la mujer, residente en otro municipio fuera de la Ribera que este diario no revela para preservar su anonimato, caminaba a solas, de madrugada, por la avenida Germanies de Carcaixent, cuando el desconocido se abalanzó sobre ella. A empujones y de manera violenta, la empujó hacia la oscuridad del garaje, cuya puerta estaba abierta dado que en ese momento estaba averiada.
Pese a su resistencia, fue arrastrada hacia el interior del aparcamiento, donde, aprovechando la soledad del recinto, consumó la agresión sexual, de la que informó en exclusiva Levante-EMV en enero pasado. Después, se fue, dejándola abandonada.
Delatado por el ADN
La mujer acudió más tarde a un cuartel de la Guardia Civil y presentó una denuncia aportando todos los datos posibles del agresor, a quien no había visto nunca antes, según las citadas fuentes. Al haber ocurrido en Carcaixent, el caso fue a parar a manos del equipo de Policía Judicial de Cullera, que, a partir de los datos y la descripción facilitados por la víctima, rastreó violaciones similares en un intento por identificar al agresor sexual y ponerlo a disposición de la Justicia.
Después de meses de intensa investigación, los agentes lograron finalmente dar con el sospechoso y ahora ha podido ser acusado formalmente y detenido después de que la prueba de ADN realizada, en la que se ha comparado su huella genética con las evidencias recogidas en su momento, haya dado positivo, lo que no deja lugar a dudas de la autoría, algo que complicará su defensa. Ahora será la jueza quien decidirá si ingresa o no en prisión a la espera del juicio.
