Un joven que fue juzgado en septiembre de 2018 y condenado por una violación grupal a una niña de doce años, cometida durante los carnavales de 2016 en Villar del Arzobispo, ha sido detenido ahora por un delito de violencia contra la mujer tras una agresión a su actual compañera sentimental en Llíria. Aunque la Audiencia Provincial de València le impuso una condena de seis años de prisión por un delito de abuso sexual a persona menor de 13 años, el ahora detenido se encontraba en libertad tras haber recurrido la sentencia.

De hecho, el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana ya le rebajó en un año la condena tras el recurso de apelación, y ahora se encuentra a la espera de que el Tribunal Supremo resuelva el recurso de casación. Inicialmente el Ministerio Fiscal solicitaba para él y para otro de los acusados trece años y medio como autores de una agresión sexual a menor de edad, y quince años para un tercero que participó de forma más activa en la agresión cometida después de que la víctima se subiera de forma voluntaria a un vehículo. En la sentencia de la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de València se consideró que no había mediado violencia, pese a que se trataba de tres jóvenes, todos ellos mayores de edad, contra una niña de apenas doce años.

El pasado viernes agentes de la Guardia Civil detuvieron en Llíria a uno de estos tres jóvenes, que ahora tiene 28 años, tras un presunto caso de violencia contra la mujer. El joven quedó en libertad ese mismo día tras tomarle declaración en el cuartel. Asimismo, el Juzgado de Instrucción número cuatro de Llíria, competente en materia de violencia machista, acordó una medida cautelar de orden de alejamiento respecto de su pareja a la espera de juicio.

Disfrazados de presidiarios

La violación grupal por lo que fue condenado en primera instancia junto a otros dos amigos ocurrió en torno a las doce y media de la noche del 7 de febrero de 2016 cuando los tres acusados, que iban con un uniforme naranja disfrazados de presidiarios, se encontraban en el exterior de un vehículo de uno de ellos en un céntrica calle de Villar del Arzobispo, donde se estaban celebrando los carnavales. Una menor, de solo doce años, pasó junto a unas amigas, y cuando se quedó a solas entabló conversación con éstos.

Según declaró en su día la víctima en el juicio, se subió voluntariamente al vehículo con los tres jóvenes porque «me hablaron muy educadamente y parecían simpáticos». No obstante, nada más subirla la colocaron entre los dos asientos delanteros y comenzaron a realizarle tocamientos.

La adolescente trató de escapar del coche pero estaban los pestillos cerrados, según explicó en el juicio, celebrado en septiembre de 2018 en la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de València.. Después el menor de ellos y la víctima se quedaron a solas fuera del vehículo, donde le hizo una felación, pese a que ella se negó en todo momento. Los tres jóvenes alegaron que desconocían la edad de la menor y que habían bebido mucho esa noche.