La Guardia Civil ha detenido a tres personas y ha investigado a otras once por un presunto delito de hurto y receptación de hasta 22 teléfonos móviles de alta gama, valorados en 20.000 euros, en la empresa de paquetería donde trabajaban, ubicada en la localidad valenciana de Riba-roja de Túria.
Según la Guardia Civil, cuando los arrestados detectaban la presencia de un teléfono móvil de alta gama entre los paquetes que pasaban por sus manos, lo sustraían mediante la utilización de distintos medios para posteriormente revenderlos por internet.
Los tres detenidos en la operación Telpaq, de 19, 34 y 44 años, y los otros once investigados, cuyas edades van desde los 27 hasta los 48 años, habrían estado implicados en una serie de hurtos desde febrero hasta junio.
Fruto de la investigación, se descubrió que cuando varios miembros del personal contratado para la distribución de paquetería detectaban la presencia de un teléfono móvil de alta gama entre los paquetes que pasaban por sus manos, lo robaban.
En ocasiones, simulaban su pérdida durante el reparto para después denunciar los hechos a la empresa, mientras que otras veces lo sustraían de la propia línea de distribución en el interior de las naves, antes de ser cargados.
Posteriormente, y ya en su poder, contactaban con posibles compradores a través de redes sociales, aplicaciones o incluso a través del boca a boca.
La Guardia Civil tiene constancia de la sustracción de 22 terminales móviles valorados en unos 20.000 euros, de los cuales hasta el momento ha sido posible recuperar 11, aunque continúan las gestiones para la localización de más teléfonos sustraídos.
Las diligencias han pasado a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Valencia.
