Tensión en Benimaclet tras atrincherarse un hombre enfermo, dueño de un arsenal

La Policía Nacional acordonó seis horas una amplia zona tras aplicar el protocolo de incidentes críticos al temer que el septuagenario causase heridos

El hombre estaba tranquilo y desarmado cuando entraron

Teresa Domínguez

Teresa Domínguez

Un amplio dispositivo policial desplegado ayer en el barrio valenciano de Benimaclet después de que un hombre enfermo de 74 años, dueño de varias armas de fuego, se atrincherase solo y amenazase con quitarse la vida mantuvo en vilo al vecindario durante seis largas horas. Finalmente, la Policía Nacional decidió entrar en el domicilio y encontró al hombre tranquilo y en perfecto estado de salud.

El barrio fue tomado por decenas de agentes de la unidad de intervención policial (UIP) –había cinco furgones de los equipos antidisturbios–, de los grupos de atención al ciudadana (GAC) –los radiopatrullas– y de los grupos de operaciones especiales de seguridad (GOES) pasadas las dos de la tarde de ayer.

Momentos antes, había llamado al teléfono de Emergencias 112 el hijo del hombre para pedir ayuda, porque su padre se había encerrado en casa y temía por su vida. Al parecer, sufre una enfermedad neurodegenerativa complicada con un proceso depresivo. Al preguntarle si tenía armas, el hijo respondió que sí.

A partir de ese momento, la Policía Nacional comprobó que el septuagenario tiene o ha tenido licencia para más de media docena de armas de fuego, entre largas (escopetas y rifles, con permiso de caza) y cortas (revólveres y pistolas de tiro olímpico). Los responsables de la Jefatura Superior de Policía de València decidieron poner en marcha el protocolo de situaciones de crisis con objetivos armados, lo que originó el amplio despliegue que generó alarma entre los vecinos.

Un hombre con un arsenal se atrinchera en su vivienda en el barrio de Benimaclet

Germán Caballero

La larga espera

De hecho, por seguridad, se impidió el paso a quienes pretendían entrar en la finca para regresar a sus domicilios, al menos hasta que los agentes desplazados al lugar confirmaron que el hombre estaba solo y que, en principio, no suponía un peligro para terceros, pero sí para él mismo.

Fuentes policiales informaron, a través de su canal de Telegram en València, de que sus efectivos se habían «desplegado para resolver un incidente donde un hombre de 74 años se encuentra encerrado sólo en su domicilio.Al parecer el hombre podría tener menoscabadas sus facultades mentales por lo que se teme por su integridad física».

Uno de los negociadores de la Policía Nacional se incorporó desde el primer momento al dispositivo y logró entablar conversación con el hombre a través de la puerta, pero pidió la presencia de los dos hijos del atrincherado para facilitar la comunicación con él.

Mientras tanto, los tiradores de los GOES se mantenían preparados para intervenir, en el caso de que el septuagenario hubiese llegado a usar las armas hacia el exterior, algo que nunca llegó a suceder, ya que no siquiera amenazó a terceros.

Dispositivo policial por un hombre que se atrinchera armado en su vivienda en el barrio de Benimaclet

L-EMV

Finalmente, tras una tensa espera, el negociador logró tranquilizar al hombre y, poco antes de las ocho de la noche, una vez que el experto dio por estabilizada la situación, se produjo la entrada controlada en la vivienda. El hombre estaba tranquilo, desarmado y sano y salvo.

Tras los policías entró el equipo médico del SAMU, que llevaba horas incorporado al dispositivo y listo para intervenir. Los sanitarios atendieron al hombre y, tras calmarlo, lo trasladaron a un hospital de la ciudad de València para ser evaluado en Psiquiatría, por lo que el episodio, por fortuna, terminó de manera positiva.