Hay otra decena de víctimas grabadas por el entrenador detenido por pederastia sin identificar
Los abusos a su hijastra destaparon al presunto pederasta del Camp del Túria, en prisión provisional
La Guardia Civil rastrea el contenido de los dispositivos intervenidos al presunto pederasta. / Guardia Civil
Las pesquisas de la Guardia Civil para saber el alcance y número total de víctimas que habrían sufrido abusos sexuales por parte del entrenador de atletismo detenido en un municipio del Camp del Túria, o que fueron grabadas por el presunto pederasta mediante microcámaras escondidas en los baños de los vestuarios donde entrenaba, prosiguen al tener constancia de al menos otras diez menores que aparecen desnudas o en ropa interior en los vídeos intervenidos al arrestado, y que todavía no han podido ser identificadas.
Como ya adelantó este periódico, las investigaciones comenzaron a raíz de una denuncia de la propia pareja del sospechoso, de 49 años, natural de Zaragoza y residente en un municipio de la comarca del Camp de Túria que Levante-EMV sigue sin revelar para preservar el anonimato de las víctimas menores de edad. De hecho la primera víctima de la que se tiene constancia es precisamente su hijastra, quien relató a su madre haber sufrido tocamientos del que en ese momento ejercía como su padrastro.
Tras esta confesión la progenitora y pareja del entrenador de atletismo encontró en su vivienda algunos de los dispositivos de grabación y parte del material pedófilo, dando traslado inmediatamente del hallazgo a la Guardia Civil e interponiendo la pertinente denuncia por los abusos a su hija (delito de agresión sexual desde la entrada en vigor de la ley de garantía integral de la libertad sexual).
El arrestado captaba con microcámaras a las menores en los baños del complejo deportivo y en su domicilio
El equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Llíria se hizo cargo del caso y tras varias indagaciones se recibió una segunda denuncia por tocamientos de índole sexual similares a una prima de la primera víctima, ambas de diez años.
Estos presuntos abusos se habrían producido en el domicilio en el que convivían hasta que se destaparon los tocamientos, y donde el presunto pederasta también entrenaba a otras alumnas del club de atletismo. Los agentes intervinieron en este inmueble abundante material pedófilo y las microcámaras que presuntamente utilizaba el sospechoso para grabar a sus víctimas sin ser detectado, tanto en su casa como en los baños de los vestuarios del complejo deportivo donde trabajaba.
En estas instalaciones deportivas, ubicadas en otra localidad, los agentes no hallaron ningún dispositivo, aunque sí se tiene la certeza que muchas de las imágenes fueron grabadas allí porque se identifican claramente los baños del complejo deportivo.
La detención
El pasado 20 de diciembre el presunto pederasta, que también entrena en otra comarca valenciana, fue arrestado en el domicilio de sus padres. Por el momento se le imputan los abusos a las dos menores de su entorno familiar y la captación y grabación de material pedófilo a al menos cuatro víctimas identificadas, entre ellas las dos anteriores. Aunque hay otra decena de menores pendientes de identificar y se sospecha que hay más víctimas que han sufrido tocamientos pero que no han denunciado. El presunto pederasta se encuentra en prisión provisional por estos hechos, por orden del Juzgado de Instrucción número dos de Llíria.
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