Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Las promotoras, preparadas para el tsunami de la covid

El sector inmobiliario afronta la crisis sin el endeudamiento de la época de la burbuja y con una mayor profesionalización tras la entrada de grandes fondos de inversión

Las promotoras, preparadas para el tsunami de la covid por ramón ferrando

El sector inmobiliario afronta más preparado que nunca el impacto del tsunami económico provocado por el coronavirus. A diferencia de la gran crisis de 2008, las inmobiliarias tienen sus cuentas saneadas, no se han endeudado con la compra de suelo, su nivel de preventas es alto y la mayoría está respaldada por grandes fondos de inversión que mantienen su apuesta a largo plazo por España. Frente a lo que pasó durante la burbuja inmobiliaria, los bancos fiscalizan cada euro que conceden para controlar que se destina a la obra y las empresas se han vuelto más prudentes. Desde el estallido de la crisis sanitaria y el confinamiento la mayoría ha paralizado el diseño de los nuevos proyectos y se ha centrando en acabar las promociones en marcha. Las grandes consultoras inmobiliarias aseguran que el sector tiene capacidad para terminar el 100 % de las promociones en ejecución. Los promotores valencianos reconocen que están ante un nuevo escenario, pero coinciden en que no va a producirse un nuevo crack inmobiliario.

La crisis de 2008 es la gran pesadilla del sector y las promotoras que la superaron están obsesionadas con no cometer los mismos errores. El sector es completamente nuevo tras desaparecer el 95 % de los promotores que había durante la burbuja inmobiliaria. Su lugar en la Comunitat Valenciana lo han tomado grandes inmobiliarias con sede en Madrid o Barcelona que están participadas por fondos y que en algunos casos cotizan en bolsa. Los escasos promotores valencianos que sobrevivieron a la crisis (que conocen a fondo el mercado local y la capacidad de endeudamiento de las familias) han sido prudentes con la compra de suelo y no han pujado con las inmobiliarias nacionales por los terrenos cuando superaban los 600 euros el metro cuadrado porque los números no les salían.

Uno de los promotores valencianos más activos (tiene nueve proyectos en marcha) explica que «antes todo funcionaba con deuda. Los bancos daban el dinero para comprar el suelo y la financiación llegaba hasta el 90 %. Ahora tienes que comprar el suelo con tus propios recursos y haber conseguido unas preventas del 50 % para optar al préstamo». Antonio Olmedo, presidente de la patronal de promotores valencianos (Aprova), subraya que la situación «no tiene nada que ver con la de 2008. Entre 2004 y 2006 hubo un exceso de crédito. Los bancos buscaban a los promotores para darles financiación. Las entidades financieras prestaban dinero incluso para pagar los impuestos. Ahora los promotores tienen un endeudamiento sostenible». Como contrapunto, Daniel Cuervo, secretario general de la Asociación de Promotores Constructores de España, advierte de que el sector depende «en más de un 85 % de las entidades bancarias» por lo que «sería bueno contar con otras fuentes de financiación alternativas»

Las consultoras inmobiliarias destacan el bajo nivel de endeudamiento. Samuel Población, director nacional de residencial y suelo de CBRE España, insiste en que es un sector «muy capitalizado y con capacidad suficiente para terminar el 100% de las promociones en ejecución. No hay el riesgo de obras sin terminar de la crisis anterior. Los requisitos de las entidades financieras para conceder un préstamo promotor actualmente son muy estrictos». El directivo cree que es posible que las condiciones de financiación se endurezcan un poco hasta que la situación derivada de la covid-19 se normalice. Una las claves del impulso del sector en los últimos cinco años ha sido la entrada de los inversores internacionales. Samuel Población está convencido de que esa tendencia se va a mantener. «El inversor institucional mantiene su interés en continuar con su actividad en España pues existe demanda de viviendas. Habrá que analizar, eso sí, el alcance final del impacto de la covid-19», puntualiza el directivo de CBRE.

Miguel Esparza, director general de Urbem, destaca que el avance de las obras está fiscalizado por los bancos, que van liberando el crédito poco a poco. «Los promotores solo pueden dedicar el dinero a la obra para la que tienen el préstamo. Esto garantiza que el 100 % de las obras que ahora hay en marcha se van a acabar», afirma.

Compartir el artículo

stats