Ha vuelto este verano a su barrio natal, en las favelas de Sao Paulo. Allí patrocina a un club de fútbol humilde, el Eledy.
Fue la primera escuela en la que jugué, en mi comunidad. Es un barrio de muchas dificultades. He podido progresar gracias al fútbol y tengo oportunidad de ayudarles. Este verano volví, como siempre que hago en mis vacaciones. Volví a mis raíces y regalé balones, botas, camisetas para entrenar. Les visito, juego con ellos.
¿Qué ve en las caras de esos niños y niñas? ¿Reconoce en ellos al niño que fue?
Para mí es especial. Siempre me acabo emocionando cuando voy y les visito. Hay muchos niños. Yo pasé por muchas dificultades cuando era pequeño, con mi familia. Cada año que vuelvo a mi barrio, veo una sonrisa más. Me emociona mucho. Quiero corresponderles y mantener este proyecto por muchos años, mientras pueda tener la suerte de seguir ayudando.
¿Cómo está encarando la pretemporada?
Tengo muchas ganas de que empiece la temporada. Pero tenemos unos días para ir preparando bien el equipo, coger fuerzas y rendir a lo máximo. Pero quisiera estar compitiendo ya.
Marcelino afirmó tras ganar al Galatasaray que el Valencia
En cuanto a concepción del juego y sistema táctico, la mayoría de los jugadores ya estamos muy integrados y sabemos cuál es nuestra misión. Nos conocemos bastante y hemos empezado muy bien. En la preparación física y con el balón todo marcha perfecto, y tenemos que apretar para conseguir estar mejor cada día.
¿Es más difícil mantener un éxito que llegar a lograrlo? ¿Con qué expectativas ven la temporada?
Somos el ValenciaValencia, la exigencia está ahí, no hace falta que te la recuerden. Tenemos un entrenador que está todo el tiempo hablándote, queriendo mantenerte arriba, sin dejar que flaquees. Esta temporada va a ser diferente y tendremos que intentar ser un poco más fuertes que la temporada pasada. Todos tenemos la misma mentalidad. Ser más fuertes en cada entrenamiento y en cada partido. No hay otra. Y solo así al final podremos conseguir nuestros objetivos: entrar en la Champions y dar la cara en esa competición.
¿Cómo cambia a un equipo tener que competir en Champions? Es una competición con muchos focos.
La expectativa es grande. Es una competición diferente a las demás, muy bonita, que llega a motivar mucho. Claro está, tampoco podremos descuidar la Liga, que va a ser durísima. Cambia entre ambos torneos la manera de competir, son rivales muy distintos. Habrá que ir cambiando el chip entre las dos y siendo siempre lo más competitivos posible. Nos estamos preparando para ser mejores.
¿Qué margen de mejora tiene el equipo? ¿Se deberían recibir menos goles en contra?
Tenemos que apretar más, sí. No llegamos a encajar más de un gol por partido en la Liga. Pero tienes razón, debemos encajar menos goles. Si sufrimos menos goles, seguramente cada gol signifique un punto y vamos a tener una buena clasificación al final del año. Con menos goles, sufriremos menos. Estamos trabajando estos días para ser más fuertes en defensa. Sabemos lo que tenemos que hacer. El míster nos lo recuerda.
¿Y Gabriel Paulista en qué debe mejorar?
Desde mi punto de vista hice una buena temporada. Pero siempre hay algún aspecto en el que mejorar. Nunca voy a estar satisfecho al 100% de lo que puedo aportar. Puedo cometer un fallo, pero intentaré hacer los menos posibles para ayudar a mi equipo a estar siempre arriba.
¿Qué le pasó en aquella expulsión contra Las Palmas?
(Reflexiona). Son errores de la vida, que a veces nos ayudan a aprender. Yo soy un jugador con experiencia, pero me pasó eso. Fueron 5 minutos en los que estuve fuera de mí, y dejé a mi equipo tirado... Es imposible volver atrás. Mi cabeza ya pasó página, lo tengo presente para ser mejor futbolista. Quiero mantener todo lo bueno que hice y dejar atrás lo negativo. Hay que ir siempre para arriba, siempre.
¿Qué tiene de especial Marcelino para dar lo mejor de cada uno de ustedes?
No tiene secretos, tiene exigencia. Usa mucho la comunicación, nos habla muchísimo. A mi me gusta que Marcelino sea un pesado. Te facilita mucho las cosas cuando te dice que es lo que debes hacer, o en qué debes mejorar...
No les deja respirar.
Me gusta, es algo que ya entendíamos los jugadores que estábamos aquí la temporada pasada y que empiezan a captar los nuevos que han venido.
Qué alegría la de su amigo Cazorla, que vuelve a jugar después de dos años lesionado.
Uff. No sabes qué alegría me he llevado. Hablé el otro día con él, por teléfono. Estaba muy contento de volver a entrenar, de volver a jugar. Yo viví en el Arsenal, muy pegado a él, parte de su sufrimiento. A un futbolista que le digas que no puede tocar un balón, que es lo que más nos gusta... Llegaron a decirle los médicos que, como mucho, podría llegar a jugar con su hijo en el jardín. Eso es muy duro escucharte eso. Verle cómo disfruta... es una alegría pura.
¿Y cómo lleva Coquelin su proceso?
Fue un golpe muy duro. Le pasó en su mejor momento, cuando estaba plenamente integrado y ayudándonos mucho. Le queda poco y lo conozco bien: volverá mejor que antes.
Se lo pregunté a Neto y se lo digo a usted ¿Va a seguir Guedes?
No he hablado desde hace unas semanas con él. Estaba de viaje con su familia, yo también. Me olvidé un poco de enviarle mensajes. Solo le hice una broma en Instagram, donde le puse «tienes que volver, amigo». Ojalá vuelva, es un jugador que nos da mucho y un chaval al que adoramos. Ojalá se quede.
