El recuerdo de un doblete para la eternidad del Valencia

Dos décadas después, ‘Superdeporte’ recuerda los grandes momentos de una época dorada con la exposición de fotografías y una charla sobre el doblete del Valencia de 2004

Superdeporte homenajea el 20 aniversario del doblete del Valencia CF

JM López

Levante-EMV

El valencianismo está pasando días complicados con Meriton al frente. Año tras año sin pisar Europa, sin ganar títulos y con la sensación de que eso costará mucho repetirlo evidencian que el Valencia CF vive ahora de todo menos una época dorada. Por eso, el evento realizado ayer por Superdeporte con la colaboración de À Punt Media cobra todavía mayor importancia. El histórico doblete firmó algunas de las mejores páginas en la historia de una entidad que demostró ser capaz de superar a Barcelona, Madrid y compañía incluso a pesar de algunas piedras en el camino que colocaron los árbitros.

En una exposición de fotos con grandes momentos de aquella gloriosa 2003/04 en la que se consiguió LaLiga y la UEFA, el conjunto valencianista demostró ser uno de los mejores equipos de Europa y su plantilla fue la envidia en muchos países que veían a los de Rafa Benítez lucir un juego vertical más allá del relato de equipo puramente defensivo. Angulo, uno de los protagonistas de aquella temporada y el futbolista del Valencia CF con más títulos en la historia del club, fue invitado para ser parte de una gala en la que recordó cómo dos años después de conquistar aquella primera de las dos ligas el vestuario se conjuró y superó los malos momentos que había vivido durante el anterior.

En el recuerdo también está aquel golpe de Ayala a Drogba que inició la conquista europea, el empate contra el Real Madrid con el famoso Ushiro Nage y la portada de Superdeporte con la mítica ‘chorizada’. El fútbol español, no solo en Valencia, recuerdan 20 años después la importancia de aquel Valencia CF del doblete.

Nadie mejor que el jugador con más títulos en la historia del Valencia para recordar el año del Doblete. Miguel Ángel Angulo se emocionó ayer al rememorar aquel inolvidable 2004. «Han pasado veinte años y parece que sea ayer. Me impresiona y me emociona recordarlo porque es una de las mejores partes de mi vida y es un momento histórico del club donde fue muy feliz y disfruté de mi profesión. Veníamos de hacer grandes temporadas, pero nunca habíamos conseguido un doblete. Esa Liga y esa UEFA después de haber perdido dos finales de Champions y de haber pasado un año desde la Liga de Málaga, todo el mundo pensaba que se había acabado un ciclo, pero el equipo volvió a hacer historia».

«Después del año de la primera Liga hicimos un año flojo y pensamos que teníamos que volver a empezar de cero y ser el equipo campeón para volver a estar arriba. Que se hablara de final de ciclo nos cabreó un poco, porque veníamos de un año flojo, quinto o sexto, ya se decía que si este es muy joven, muy mayor, que si este no sirve... Nos empezamos a cabrear y al final hicimos algo muy bonito. Rafa Benítez fue clave, sacó el mejor rendimiento a cada jugador, ya eran famosas las rotaciones, uno salía, el otro entraba y el equipo no se resentía. Cuando perdimos la final de Champions volvimos con la sensación de que Europa nos debía algo y no se nos podía escapar. No dejamos a los familiares venir antes, no dejamos a los representantes que vinieran, fue un claustro. No queríamos que nada nos desviara de la atención. Todo eso lo eliminamos y el hotel de Göteborg fue un búnker», explicaba Angulo.

Rafa Benítez, la clave

El asturiano, ahora entrenador del Mestalla, puso en valor las exigentes charlas de Benítez como una de las claves del éxito del equipo. «Con Rafa no podía estar tranquilo en la charla porque en cualquier momento te preguntaba y si no sabías la respuesta te daba el hostión. Cuando veía que algún jugador estaba distraído hablaba con un jugador para que hablara con el otro, todos hacíamos de entrenadores psicólogos y eso es lo que nos hizo estar conectados», desvelaba.

El Jefe de Información de Superdeporte, Vicent Chilet, fue uno de los periodistas que regresaron en el vuelo del equipo. Es el mejor año de la historia del Valencia. «Fue un año de muchas emociones. Tuve la suerte de volver en el avión del equipo y recuerdo ver desde arriba todas las avenidas llenas, nunca he visto nada igual. Estaba lleno de gente. Fueron momentos de felicidad e ilusión. El equipo jugaba de memoria con unos mecanismos que lo hacían un rival invencible», afirmó.

La portada de la ‘chorizada»

El entonces director de Superdeporte, Vicente Bau, y el exredactor jefe Carlos Bosch recordaron una portada mítica aquella temporada: la famosa «chorizada» del ‘Ushiro Nage’ en el Bernabéu. «La portada de la chorizada de Supedeporte sirvió como vitamina para el equipo ante el poder establecido de Madrid. Y para un loco del periodismo como yo, un gustazo. Me bajé a la gasolinera de la Avenida de Aragón y compré un paquete de chorizo y algo más porque me daba vergüenza. Llamé a la diseñadora Begoña del Cura para decirle la idea y alucinaba», recordaba Bau. Con la misma ilusión habló Bosch de aquella portada. «Recuerdo cómo nuestro fotógrafo en el Bernabéu me quería matar porque no le publicamos ninguna foto en la portada. La portada significaba la unión de todos y la rebeldía contra el Real Madrid y esa portada de papel se viralizó cuando aún no existía el concepto de viralizar», aseguró.

«Angulo fue el responsable de la Liga de la peluca por su gol en Zaragoza. En Superdeporte hicimos 100.000 pelucas naranjas y más pequeñitas que la rojiza de Jaume Ortí. Montamos un caos en la Avenida de Aragón tirando las pelucas por la ventana», recordó Bau. El recuerdo a Jaume Ortí y al mítico Españeta fue el punto emotivo de la gala.