Levante-EMV, Valencia.

La renovación en las direcciones del Valencia CF y el PSPV ha propiciado la apertura de una nueva etapa en las relaciones entre el club y la formación política. Dos semanas después de recibir a Vicente Soriano, presidente de la entidad valencianista, Jorge Alarte, secretario general de los socialistas valencianos, convocó el lunes por la tarde a la portavoz del grupo municipal, Carmen Alborch junto al secretario general del PSPV en la ciudad, Rafael Rubio, que serán quienes tengan que posicionarse en relación a los nuevos planes para el viejo Mestalla. El club pretende introducir cambios sustanciales en la recalificación de la parcela: cambiar el uso de residencial a terciario e incrementar las alturas.

El propio grupo municipal informó ayer, en un escueto comunicado, que el objeto del encuentro era "analizar la posición en torno a los planteamientos del club para la parcela del viejo Mestalla". Alborch reafirmó ayer a Levante-EMV su disposición al diálogo: "Estamos dispuestos a escuchar con buen talante, pero no podemos ver con buenos ojos algo que no nos han presentado".

Esta predisposición choca con la demanda que el PSPV mantiene en los tribunales contra el incremento de edificabilidad en los terrenos del estadio actual. ¿Se retirará dicha denuncia? La respuesta está en el aire. Si el proyecto cambia, los socialistas tendrán que analizar las nuevas condiciones urbanísticas y decidir si siguen adelante con una demanda nueva, según apuntó Rubio.

Pasar a terciario eliminaría el problema de la excesiva densidad de viviendas, pero deja en suspenso los equipamientos públicos vinculados al uso residencial, que son un compromiso con los vecinos de la zona. Para acercar posiciones, Alarte se ha comprometido a facilitar un encuentro directo entre Soriano y la dirección del grupo socialista municipal. Mientras el Valencia CF busca el consenso político, la alcaldesa Rita Barberá, sin embargo,ha avanzado que no le gusta la idea del incremento de alturas.