?

Las fórmulas para crear en las ciudades redes de puntos de recarga para los coches eléctricos son varias. Además de los enchufes en los aparcamientos públicos y en las gasolineras, se contempla la posibilidad de adaptar las cabinas telefónicas para recargar las baterías aprovechando una infraestructura urbana existente y normalmente cercana a la calzada. El enchufe se colocaría debajo de la cabina y al lado debería haber espacio para aparcar. La instalación de un punto de recarga cuesta entre 2.000 y 4.000 euros, 6.000 si hay que hacer obra.

En este sentido, el portavoz de Els Verds de Valencia, Giuseppe Grezzi, criticó ayer al gobierno de Rita Barberá por haberse quedado fuera de la iniciativa del Ministerio de Industria, a la cual se han sumado Madrid, Barcelona y Sevilla. "Desconocemos las razones de la falta de participación de la ciudad de Valencia del proyecto de coches eléctricos, aunque si hay que buscarlas estamos seguros que se sitúan en la órbita de la prolongada e incomprensible inactividad de la otrora pionera Concejalía de Cambio Climático", declaró el portavoz de Els Verds.

Grezzi instó al ayuntamiento a ponerse en contacto "de inmediato" con el ministro Miguel Sebastián -que ha definido el proyecto de los coches eléctricos como "una cuestión de estado"- para "firmar el acuerdo de instalación las centralitas de recarga en la ciudad", lo que -a su juicio- "permitirá el despegue definitivo de los coches eléctricos en nuestra ciudad, la segunda ciudad más contaminada de España".

Grezzi recordó que los coches eléctricos apenas se oyen, reducen las emisiones de CO2 y además "darían una oportunidad de futuro a la industria automovilística" en crisis. Els Verds emplazó ayer al ayuntamiento a sustituir todos los vehículos públicos y las maquinas de limpieza por vehículos eléctricos aprovechando las ayudas del Ministerio de Industria que oscilarán entre los 750 y los 20.000 euros en función del tipo de vehículo. El ayuntamiento ha introducido este tipo de vehículos en la EMT y en la Policía Local.