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Después de un largo proceso de selección, pruebas físicas y varios test teóricos incluidos, 147 nuevos agentes se incorporarán este mes al cuerpo de la Policía Local de Valencia. Dentro de estas oposiciones, 17 de las 147 plazas disponibles eran por concurso de movilidad. A las cuales pueden optar agentes de otros municipios con una antiguedad mínima de dos años. Los 17 policías proceden de Paterna (4) y Alginet, Buñol, Tavernes de Valldigna, Algemesí, Puçol, Carlet, Benifaió, Almassora, Sueca, Burjassot, Alfafar, Marines y Picanya, de donde se traslada uno en cada caso.
Esto conlleva que policías formados y con experiencia deban ser sustituidos por otros que carecen de la necesaria formación, lo que supone un coste añadido para los ayuntamientos de los municipios de procedencia. Estos agentes interinos deben pasar cuatro meses de formación en el IVAS (Instituto Valenciano de Seguridad), conllevando no sólo un perjuicio en la calidad sino un coste económico añadido para el consistorio de que se trate.
Por ejemplo, este año un 25 por ciento de los aprobados por movilidad provienen de la Policía Local de Paterna. Este problema se acrecienta en municipios con un número muy limitado de policías, como es el caso de Marines.
Las pruebas, que se iniciaron en abril de 2008, consisten en un test de cultura policial yy un segundo examen teórico de historia valenciana. Una vez superados estos dos exámenes el aspirante debe pasar un reconocimiento médico. Más tarde se enfrentan a un test que pone a prueba sus conocimientos sobre el callejero e historia de la ciudad. Dicha prueba no es eliminatoria pero sirve para puntuar.
Los agentes que aprobaron las oposiciones tomarán posesión de su cargo en breve como funcionarios en prácticas, exceptuando los 17 que accedieron por concurso de movilidad, quienes adquieren la plaza en propiedad.
