El periodista y escritor Francisco Pérez Puche comparte con la alcaldesa, Rita Barberá, su pasión por Valencia. En su último libro, y ya van unos quince sobre la ciudad, descubre el "Secreto a voces" en el que se ha convertido el Cap i Casal. Hoy se presenta, a las 13 horas, en el Salón de Cristal del ayuntamiento.

¿Cuál es el secreto a voces que descubre en su nuevo libro?

En "Valencia", la anterior obra que ya se agotó, recordaba la frase de Bernie Ecclestone, "Valencia es el secreto mejor guardado". Entonces, con la Copa América y la Fórmula 1 nos descubrió un turismo que ya se ha consolidado, a pesar de la crisis. El título actual es una manera de responder al hecho de que Valencia ya es un secreto a voces. No es el secreto mejor guardado, que decía Ecclestone, sino que es un secreto conocido, muy abierto y visible todos los días, porque hay mucho turismo.

¿Qué aporta este segundo libro respecto al anterior?

Sobretodo la fotografía aérea y la presencia del fotógrafo en dos ediciones de la Fórmula 1. También la mirada sobre todo tipo de turistas: los jovenes que vienen en mochila, el turismo digital que permite a la gente decidir a través de internet dónde va de viaje con toda libertad. Y también se incorpora la cultura de la bicicleta y todas las novedades gráficas que no estaban en el libro de 2006 como el puente de l'Assut de l'Or, el Ágora o la Fórmula 1.

¿Qué diferencia su libro de los que se han escrito desde y sobre Valencia?

La forma que yo pueda aportar diferente a la hora de escribir y la forma de ver la ciudad que tiene Pepe Navarro. Es un fotógrafo de Tarragona, que vino a Valencia con su padre cuando tenía cinco años, pero que la ha descubierto como profesional de la fotografía en 2006. Siempre recuerdo la anécdota cuando me llamó un día: "¡He encontrado una plaza que es redonda!" Y yo le dije: "hazle fotos, hazle fotos". Porque yo no quería acompañarlo, quería que fuera sólo para que hiciera su descubrimiento de la ciudad. Y, efectivamente, su trabajo permite ver la ciudad con ojos de "foraster" acostumbrado a ir por el mundo. Y yo procuro dar una nueva visión de cómo va cambiando la piel de la ciudad poco a poco, según los que la observamos desde dentro, que a veces no vemos el cambio tan bien como lo ven desde fuera.

¿Cómo se coordinó con el fotógrafo?

El fotógrafo se encerró con 10.000 fotos e hizo una selección de 300 para quedarse con las 100 finales. Yo no intervine. Aunque él sí conocía los temas de los que yo iba a hablar. Cada uno aportó su idea de la ciudad y fuimos coincidiendo.

A quién va dirigido el libro, ¿a los valencianos que quieren redescubrir su ciudad o para los turistas?

Es un libro que puede interesar a cualquier turista, a cualquier persona de fuera de Valencia que no conozca la ciudad, de la misma manera que buscas un libro de Toledo, Tarragona, Madrid o Barcelona. La editorial Lunwerg tiene colecciones de todas las ciudades del mundo y, como está traducido al inglés, también lo comercializa en muchos países.