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Garantía en los alquileres para ocupar las más de 60.000 viviendas vacías

Compromís creará una oficina del alquiler y empleará los solares de forma provisional compensando a los dueños

¿Cómo solucionar el problema de la vivienda con más de 60.000 pisos vacíos? Compromís asegura que la clave está en el alquiler. Sin embargo, en una sociedad donde adquirir una vivienda ha primado por encima de todo y el alquiler se ha concebido como una acción similar a la tirar el dinero a la basura el quid de la cuestión se centra en cambiar la mentalidad ofreciendo las garantías necesarias a los propietarios y un precio adecuado para los inquilinos. En esa tarea se centrará la nueva Oficina del Alquiler que prevé Compromís y que supondrá un punto de encuentro del propietario y del inquilino, con garantías jurídicas y la ayuda necesaria. Es decir, se trata de garantizarle al dueño que sí o sí, va a cobrar y que su casa va a estar en condiciones ya que tiene el respaldo del ayuntamiento.

La coalición que lidera Joan Ribó asegura que una de las principales medidas que adoptará el nuevo gobierno es saber de cuántas viviendas dispone el ayuntamiento para ponerlas a disposición de la ciudadanía. Y es que Compromís asegura que el gobierno de Rita Barberá no ha detallado las viviendas municipales que existen. Además, la formación asegura que no habrá más viviendas nuevas en Valencia. Sobre todo, mientras existan inmuebles vacíos.

Esta misma idea se mantiene con los solares que dejarán de ser espacios vallados que, limpios o sucios, no tiene uso alguno para albergar zonas verdes, espacios deportivos, lugares para mascotas, huertos urbanos... Eso sí, por un tiempo. Y es que la previsión es destinar las parcelas existentes en la ciudad a uso público de forma provisional, mientras no esté prevista ninguna construcción. Ahora bien, para compensar al propietario éste dejará de pagar el IBI mientras su parcela albergue un uso público. Todo ello se llevará a cabo tras un registro de solares y una modificación en la ordenanza.

Habida cuenta de que no hay ni prisa ni previsión de construir nuevos pisos, la prioridad se centrará en rehabilitar fachadas, viviendas y barrios para generar empleo, por una parte, y animar a la iniciativa privada a que promueva vivienda pública mejorando entornos urbanísticos degradados.

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