La Asociación de Vecinos de El Grau asiste «con indignación» al montaje de toda la insfraestructura para la segunda edición del Festival Mare Nostrum, que según su presidente Jesús Vicente, ya les ha generado más basura. «Han limpiado en la zona que van a ocupar este fin de semana y han lanzado todos los restos a un solar que hay por las naves de Juan Verdeguer», manifestaba ayer Vicente.
El gran malestar de los vecinos es para con la administración municipal, que no hace cumplir las ordenanzas y esgrime además que la concesión de la licencia de actividad es competencia de Gobernación. «Nos han tomado el pelo y nos sentimos abandonados», apuntaba Vicente, quien adelantaba que sólo les queda la opción de «emigrar» el próximo fin de semana para evitar el ruido y la suciedad que generará el evento.