La ciudad de Valencia es probablemente la única gran ciudad española que no se ha apuntado a las nuevas tendencias gastronómicas, al menos en lo que a los mercados o los puestos callejeros se refiere.
El anterior equipo de gobierno planeó la instalación de un mercado gourmet, al estilo del madrileño mercado de San Miguel, en las históricas instalaciones del Grao, pero las elevadas exigencias municipales en cuanto a inversión echaron para atrás a los posibles interesados y luego, cuando se rectificaron las condiciones, los responsables municipales se «contraprogramaron» a sí mismo proponiendo otro mercado similar en el tinglado número 2 del puerto, que está a apenas doscientos metros del primero. Al final, el proyecto se frustró y los vendedores, apenas una docena, se han quedado sin nuevo mercado y sin reforma del que tienen.
Puestos callejeros
Por otro lado, la Academia de Gastronomía propuso a finales del año pasado la instalación de puestos de comida callejera de alto nivel en Valencia. Se trata de las ya famosas «Food Trucks», popularizadas este verano en un concurso televisivo. Eran tendencia y el Ayuntamiento de Valencia estaba dispuesto a modificar la Ordenanza de Ocupación de Vía Pública para que no hubiera problemas. La academia había hablado incluso con la Cámara de Comercio, la Agencia Valenciana de Turismo y la Federación de Hostelería.
A día de hoy, no obstante, el proyecto está en punto muerto. Según ha explicado su principal impulsora, Cuchita Lluch, la academia no ha hecho ningún nuevo intento de negociación con el actual equipo de gobierno y no se ha avanzado nada en este asunto.
