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Divagaciones

Solidaridad valenciana

Solidaridad valenciana

Sé que mis palabras son mudas y se pierden en la oscuridad de este mundo cruel, que no conoce el amor ni la piedad. Hasta mi propia estética y bienestar que me rodea me daña, Hay un grito de impotente dolor que martillea el alma: la situación de miles y miles de seres humanos que están huyendo del horror, llegando a otro horror... La evacuación del campo de Moira en Lesbos ha sido dantesca. Quebrantando la dignidad del Ser, empujaban a los indefensos refugiados, asustados, medio muertos de frio, mojados€ En estos momentos ser europea produce una gran vergüenza.

Pertenecer a la Europa de las Regiones era una esperanza de progreso. Pero la vieja y culta Europa, mira hacia el lado de la economía y del confort, poniendo en riesgo su identidad democrática de altos valores de libertad y justicia, de derechos humanos, de respeto hacia la vida€

He visto a los mandatarios europeos en la última asamblea; parecían clichés unos de otros. El acuerdo entre Europa y Turquía esconde más miedo político a la ultraderecha que está ganando votos, que al debate de la razón que lleva a la reflexión. ¿No cruzan por sus mentes acomodadas, ráfagas de sus posibles familias, extraviadas en la pavorosa huida?

Pagan con dinero ¡ay! lo que no quieren afrontar, se someten a la voluntad turca que probablemente aumentará cada vez más. Cerrar puertas y fronteras a los que huyen del horror y la muerte es olvidar un pasado que también fue de muerte y dolor.

Hay una guerra en una parte de Oriente, entre la libertad y brutalidad: personas esclavizadas y torturadas, mutiladas, separadas de sus hijos que andan perdidos€

El resultada de cómo se resuelve el problema de los refugiados fijará el provenir de los europeos, actualmente, egoístas y desmemoriados.

Ahmet Davutoglu ha mirado a los veintiocho con un cierto desprecio y orgullo del que se siente necesario: «Estoy seguro, espero que lograremos un acuerdo», y ha añadido: «Los objetivos de la UE y de Turquía coinciden en ayudar a los refugiados sirios de la forma adecuada». Solo palabras que significan su adhesión al club comunitario, ¡aué bochornosa reunión! Negocian acuerdos con vidas de seres humanos abatidos por el pavor.

A las puertas del Consejo, donde se celebra la cumbre, Amnistía Internacional ha instalado una pantalla gigante que resume los temores de algunos líderes: «No se comercia con los refugiados. Detengan el acuerdo». Y un colectivo de kurdos protestaba contra las «atrocidades» de Erdogan.

Por otro lado, las mafias explotan probabilidades de que permanezcan en el suelo europeo para ganar clientes. Pero el «No vengáis a Europa» del presidente del Consejo, D. Tusk, escalofría.

Sin embargo, la Generalitat Valenciana, gestionó transportar a 1.400 refugiados sirios desde la isla de Lesbos hasta Valencia, pese al bloqueo del Ejecutivo Central, que aludió al «procedimiento europeo». Ante una iniciativa solidaria de los valencianos, Baleària, cedía un barco para evacuar refugiados hacia la Comunitat Valenciana. El Consell aportará 350.000 euros para 15 ONG que trabajan sobre el terreno.Desde muy joven, me he sentido europea y cuando he ido a Norteamérica he declarado, como ellos hacen: soy de Valencia, España, Europa. Ahora solo quiero ser de esta compleja ciudad que, a veces, odio porque la amo.

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