Cesar a Rita Barberá como senadora con un añadido: el apoyo de su propio partido. El Consell dio ayer su criterio favorable a la Proposición de Ley para modificar la designación de los senadores, lo que, en la práctica, supondrá que el PP tendrá la última palabra en la revocación del cargo de senadora de Rita Barberá. Y es que el texto incluye una modificación sustancial: «que la revocación solo se pueda producir en circunstancias excepcionales y concretas que supongan un perjuicio grave a las instituciones» y que junto a la concurrencia de estas causas «se pueda exigir adicionalmente que el grupo parlamentario que propuso a la persona designada senadora esté de acuerdo con su revocación». Es decir, que el PP, con Isabel Bonig al frente, tendría la última palabra en la destitución de Rita Barberá como senadora.

El documento aprobado ayer por las Corts también modifica la propuesta de Podemos en la que solicitaban que la revocación pudiera ser posible con una mayoría parlamentaria ya que «se debe respetar una distribución proporcional» para evitar que este mecanismo «pueda ser utilizado de manera partidista como una herramienta para someter a las minorías o para destituir a personas que resulten incómodas para la mayoría parlamentaria».

Y es que, aunque la iniciativa responde a la clara intención de conseguir que las Corts cese a Barberá de senadora y rinda cuentas en el parlamento valenciano, el Consell entiende que es «conveniente establecer garantías» para que este mecanismo revocatorio «no esté sometido al albedrío de las mayorías parlamentarias». De esta manera, el criterio favorable a la Proposición de Ley propone que la mayoría exigible «debería ser de una mayoría cualificada de, por ejemplo, dos tercios» en lugar de una mayoría absoluta que se considera insuficiente.

Pero ahí no acaba la cosa. La propuesta también incluye la modificación del artículo 16.2, lo que supone que el cargo de senador o senadora designado por las Corts «implica la obligatoriedad de ponerse a disposición de la cámara y rendir cuenta delante de ésta en las comparecencias que soliciten los grupos parlamentarios».

La vicepresidenta del Consell Mónica Oltra, explicó ayer que considerando que los senadores territoriales «obtienen su legitimidad por designación de las Corts es justificable que la cámara pueda exigirles que rindan cuentas e incluso que se les cese del cargo mediante un mecanismo revocatorio que, eso sí, debe establecer unas garantías».

El pleno de les Corts eligió en julio a los seis senadores territoriales de esta legislatura: Alberto Fabra y Rita Barberá a propuesta del PP, Joan Lerma (del PSPV), Carlet Mulet (Compromís), Luis Crisol (Ciudadanos) y Pilar Lina, de Podemos.