La Intervención General de la Administración del Estado, dependiente del Ministerio de Hacienda, ha confirmado «la imposibilidad del Consorcio Valencia 2007 de hacer frente a sus obligaciones derivadas de sus diferentes contratos suscritos para su financiación». Así se desprende de la auditoría realizada de las cuentas de la entidad que gestiona la Marina Real Juan Carlos I, que cerró 2015 con unas pérdidas de 22,1 millones de euros (83,3 en 2014) y una deuda total acumulada que alcanza los 437 millones de euros.
El análisis financiero no hace más que corroborar que el Consorcio Valencia 2007 está en situación crítica y en quiebra ante la imposibilidad de devolver el crédito ICO que se concedió en 2005 por valor de 319 millones de euros y del que no se ha podido hacer frente a ni un solo vencimiento. Ante esto, la Generalitat Valenciana y el Ayuntamiento, dos de los tres organismos que junto a la Administración General del Estado forman parte del consejo de administración de la entidad, continúan exigiendo al Gobierno de España que condone la deuda. Sin embargo, como ya anunció el ministro Cristóbal Montoro, no se va a atender la petición. Lo que sí está haciendo el Estado es hacer frente a los avales correspondientes por los sucesivos impagos, cifra que ya va por 71,26 millones de euros.
Buscar soluciones
El director estratégico del Consorcio Valencia 2007, Ramón Marrades, reiteró ayer la posición de la entidad respecto al crédito ICO. «Hay que buscar una solución política, no hay otra vía», aseguró, al tiempo que recordó que la entidad está negociando con el Banco Santander «la solución financiera» para hacer hacer frente al otro gran problema que acumula: 66 millones de euros de deuda (una póliza de crédito 54 millones y a un préstamo de otros 12 millones). Hay que recordar que el Santander ya cuenta con sentencias a favor para embargar los ingresos de que dispone el Consorcio por concesiones (Heineken, la Sucursal, Fundación EDEM?).
Con todo, Ramón Marrades asegura que el Consorcio Valencia 2007 cerró 2015 «con una situación mejor» que anteriores ejercicios. «La cifra de negocio ha aumentado en 284.000 euros (4,1 millones en total), mientras que hemos reducido los gastos de personal en 66.000 euros (1,2 millones). En dos años hemos elaborado un plan para igualar la cifra de ingresos y la de gastos, y estamos dando pasos importantes para hacerlo, como la utilización transitoria de las bases de la Copa del América por cinco años, el nuevo uso para la base del Alinghi o la futura concesión privada de la explotación de los amarres», sostiene el director estratégico del Consorcio Valencia 2007. Lo cierto es que la deuda del Consorcio se ha estabilizado en torno a los 437 millones de euros, después del espectacular aumento de los últimos años.
La auditoria de la Intervención General del Estado recuerda que la disminución sostenida del patrimonio neto del Consocio 2007 «provoca la incertidumbre sobre la capacidad financiera para continuar su actividad, y liquidar sus pasivos que son superiores a su activo real».
El mismo informe viene a refrendar las demandas de la Generalitat Valenciana y el Ayuntamiento, ya que asegura que en caso «de no recibir financiación» de las administraciones consorciadas la viabilidad está en entredicho.
