El Partido Popular aseguró ayer que en Valencia ya se han propagado 60 focos de botellón y acusó a la concejala de Seguridad Ciudadana, Sandra López, de convertir el «cap i casal» en un gran «botellódromo». El edil popular, Alberto Mendoza, considera que solo ha sido necesario «un año al frente de la Concejalía de Protección Ciudadana para que la señora Gómez haya conseguido duplicar prácticamente la incidencia del fenómeno del botellón en la ciudad», al tiempo que aseguró que la incidencia de este problema «está llegando a la práctica totalidad de los barrios».

Según explicó Mendoza, su partido ha podido comprobar «recientemente» que este problema «sigue agravándose en zonas como Plaza de España, Paseo Neptuno, Creu Coberta, inmediaciones del cementerio general, Blasco Ibañez, Plaza Honduras, Plaza del Cedro, proximidades a la nueva Fe, avenida de Aragón y el barrio de Russafa, entre otros», explicó el edil.

Además, según denunció Mendoza ya son «cerca de 60 los focos de botellón extendidos por la ciudad», en zonas tales como Plaza de Benimaclet, calle Doctor Vicente Zaragozá, proximidades al Hospital de la Malvarrosa, paseo Neptuno, Marina Real, barrio del Cabanyal, calle Padre Porta, plaza del Cedro, calle Explorador Andrés, Creu Coberta, Russafa, barrio de San José, calle Eduardo Boscá, calle Bolsería, Plaza del Carmen, calle Quart, Alameditas de Serranos, Guillem de Castro, parque de Marxalenes, calle Ruaya, zona de Cánovas, calle En Sanz, calle En Llop, avenida de Aragón, calle Bélgica, calle Antonio Suarez, calle Periodista Ros y Belda o plaza de España.

El edil popular recordó «las recientes quejas» de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Valencia, respecto al balance del año de gestión municipal, en la que denunciaba la falta de solución en asuntos como el botellón y la limpieza en la ciudad.

Por todo ello, Mendoza considera que la concejala Sandra Gómez «se ha dedicado desde su llegada al gobierno municipal a anunciar sin reflexión alguna que iba a solucionar el problema del botellón, destacando medidas como el abaratamiento de las copas o incluso la creación de un botellódromo». «A día de hoy la realidad es que el botellódromo se ha creado, pero uno inmenso en toda la ciudad y sin control alguno por parte de la concejala», aseguró el regidor del principal partido de la oposición. «Esperemos que su salida del Área de Protección Ciudadana contribuya a paliar progresivamente este problema casi diario que tiene la ciudad», deseó.

Gómez: «Se cierran locales»

Mientras, Sandra Gómez puso en valor la «voluntad política» del Ayuntamiento de Valencia en «ordenar el ocio nocturno» en la ciudad, especialmente en las zonas del centro histórico, Russafa y el Cedro. De hecho, destacó que en el último año han cerrado varios locales en esta última zona de Valencia como consecuencia de las «reiteradas denuncias que había sobre ciertos establecimientos que gestionaban sus locales al margen de la normativa y leyes». «Este año por primer vez se ha llevado a cabo una campaña de cierre de establecimientos que estaban fuera de las normas de convivencia», señaló. Reiteró que «poco a poco todos los vecinos de toda Valencia notarán el cambio» y que hay una actitud diferente del ayuntamiento y Generalitat.