Varios cascotes se desprendieron ayer de la torre de la iglesia de Santa Maria del Mar, en El Grao, obligando a acordonar la zona para evitar posibles incidentes con los transeúntes de la zona. Las lluvias de las últimas semanas y el viento han hecho mella en la estructura del campanario, que en 1689 el cantero Antonio Borrés elevó en altura y lo finalizó pues aún no estaba terminado. De estilo barroco; el remate fue destruido en la Guerra Civil Española (1936-1939) ya que este era usado como torre de defensa con artillería antiaérea. Al parecer de ese mortero de tierra procederían los cascotes. Disciplina urbanística evaluará ahora el informe de bomberos para delimitar las causas del desprendimiento.