El Ministerio de Medio Ambiente ha convocado al Ayuntamiento de Valencia, al puerto y a los vecinos de El Saler a una reunión la semana próxima para buscar una solución «más definitiva» para la Casbah, una urbanización fuera de ordenación del Parque Natural de la Devesa que ha sufrido graves daños tras el temporal del pasado fin de semana. Así lo anunció ayer la secretaria de Estado de Medio Ambiente, María García Rodríguez, tras visitar la Casbah, donde el mar ha engullido el paseo marítimo y amenaza la estabilidad de varios de estos chalés construidos en los años 70.

Una reunión ante la cual el ayuntamiento tomó ayer posiciones reclamando mediante una moción de urgencia que irá al pleno de manaña la declaración de zona catastrófica y la ejecución de las medidas a largo plazo previstas en la Estrategia de Protección de las playas del Sur de Valencia aprobada por el Gobierno en 2015. Estas medidas, que incluyen el trasvase de 5,5 millones de metros cúbicos de arena, que se podrían extraer de grandes bancos de aren existentes frente a las costas de Cullera, permitan recuperar la playa tal como era hace 30 años, cuando entre las viviendas de la Casbah y el mar había casi cien metros de distancia. El coste de la intervención, considerada de prioridad alta en las playas de Pinedo, la Devesa y Garrofera,es de 50 millones de euros. En la moción, se pedirá la declaración de zona catastrófica de todas las playas del sur de Valencia (Pinedo, l´Arbre del Gos, El Saler, la Garrofera, la Devesa y el Perellonet-el Recatí). «Si el Ministerio de Fomento se ha gastado 5.000 millones en rescatar autopistas fantasma, también puede destinar 50 milllones a recuperar las playas del sur de Valencia», destacó Campillo, declaró el concejal de la Devesa, Sergi Campillo, durante la visita a la Casbah, en la que también estuvieron presentes los concejales Vicent Sarrià (Desarrollo Urbano), Playas (Pilar Soriano) y Pedanías (Consol Castillo).

Sarrià adviertió a la secretaria de Estado del riesgo que corren las playas del parque natural de la Devesa si no se actúa en la regeneración de la costa. Los representantes municipales reclamaron medidas y no «parches».

Unas playas, según recuerda la moción del Govern de la Nau, están retroceso por la falta de sedimentos fluviales y por el efecto barrera del puerto, que ha ido creciendo avalado por las declaraciones de impacto ambiental favorables del Ministerio de Medio Ambiente.

«Empezar ya»

La secretaria de Estado, que ayer visitó junto con el Ministro de Fomento las zonas afectadas por el temporal, admitió en la Casbah en relación a la Estrategia de Protección que se ha iniciado ya la redacción de un proyecto con medidas concretas que aporte una solución «en los plazos más ágiles».

Ese proyecto, destacó la secretaria de Estado, debería contar con «el mayor consenso» de las partes implicadas y tendrá que ser sometido a evaluación ambiental. García Rodríguez, quien destacó que lo importante es «empezar ya».

En relación a la situación concreta de la Casbah, la secretaria de Estado explicó que es muy complida y «fragil» porque las casas están encima de la arena y cualquier cimentación puede acabar empeorando la situación del litoral. La semana próxima se aboradarán las actuaciones que se pueden llevar a cabo desde el punto de vista administrativo, ambiental y técnico en la Casbah para dar una solución de defensa «sin afectar a otros puntos». La intervención directa «no es fácil», según la secretaria de Estado, porque puede afectar a la erosión en otro punto al ser una zona con gran retroceso de la playa.

El alcalde Joan Ribó, que no estuvo en la visita a la Casbah, se refirió tras una visita a la Escuela de Diseño a la delicada situación de las playas del litoral sur de Valencia. «Nosotros lo que hemos planteado seriamente „destacó Ribó„ es hacer un proyecto de restauración de la zona entre todas las partes implicadas». «Sabemos que el Puerto está dispuesto a poner recursos para proteger este espacio, porque tiene una cierta responsabilidad puesto que la costa se retira hacia adentro dentro por la barrera que hace». Pero «es imprescindible que el Ministerio de Fomento y Costas también hagan su aportación, y tenemos que sacar adelante un proyecto entre todas las Administraciones para dar una respuesta duradera», afirmó Ribó.