A las cinco de la mañana estaba ayer en pie Joan Ribó para la visita programada, una hora más tarde, a la Tira de Contar de Mercavalència. E

Dentro de la política de mejoras en los mercados municipales y de la promoción de l'Horta de València como un espacio generador de empleo, Mercavalència ha invertido cerca de 800.000 euros en la reforma de la Tira de Contar, que seguía en las mismas condiciones que hacía tres décadas. Hay que recordar que el origen de la Tira de Contar se remonta a los tiempos de Jaume I, y que desde entonces ha otorgado a los agricultores de la huerta valenciana el derecho a la venta directa. Se realiza de madrugada, arranca sobre las cuatro de la madrugada y termina a las ocho. Aquí las frutas y verduras recién recolectadas van de las manos del agricultor a las del comprador, que busca el producto autóctono y de proximidad, y un trato más cercano. Después las compra el consumidor en las diferentes tiendas de la ciudad. Ribó se mostró «muy satisfecho» por el «cuidadoso trabajo de renovación» que se ha llevado a cabo en la nave que acoge la Tira de Contar. «Antes estaba todo muy viejo, ahora el objetivo es potenciar el espacio, clave en la política de fomento del producto de proximidad que impulsamos desde el Govern de la Nau», dijo.