Fernando Giner acusaba ayer a Joan Ribó, de «falta de sensibilidad social» y de gestión económica en el Cabanyal que, dos años después de su llegada al gobierno, sigue «degradado, okupado y sin inversiones».

Giner destacaba que un reportaje fotográfico realizado por su grupo plasma «los compromisos incumplidos» de Ribó en el Cabanyal con pintadas, basura y muebles acumulados, cables eléctricos colgando, gallos paseando por las calles, puertas forzadas, casas tapiadas e infraestructuras inservibles. «No me sorprende su mala gestión; ya avisamos que era mal gestor pero sí me sorprende que no se preocupe de las personas», ha dicho Giner, para quien afrontar los problemas del Cabanyal requiere «gran consenso y mucha sensibilidad para que los vecinos puedan vivir de forma digna y el barrio sea conocido en el resto de València». En su opinión, el principal problema en el Cabanyal es «social», a lo que se une la falta de inversión.