Los vecinos y barqueros del Palmar no pueden acceder al embarcadero municipal al colocarse una puerta en el acceso que conecta la pedanía y el espigón. Desde el pasado 1 de julio, el camino que daba paso y servicio a los vecinos y turistas fue cerrado por los propietarios del terreno tras negarse a una expropiación por parte del ayuntamiento.
Los dueños de la cancela de hierro dicen llevar "casi dos décadas con problemas en las negociaciones con las instituciones. En un primer momento, la solución era una expropiación, pero las comunicaciones se torcieron por temas económicos". Es ahora, dieciocho años después, tras la caída hace dos meses de una vecina y su posterior denuncia, cuando los propietarios han decidido cerrar totalmente el paso para evitar futuros conflictos.
Entre tanto, más de 20 pesqueros están parados y sin trabajo porque no hay otro camino público que permita acceder hasta la zona de las barcas. Además, aseguran que llevan ya varios días contactando con el ayuntamiento y todavía no han recibido respuesta.
Otra preocupación tras el cerramiento de la parcela es la celebración de la festividad de la pedanía el próximo 4 de agosto, en la que, como cada año, el Santísimo Cristo de la Salud sale en romería por el lago de l´Abufera accediendo por la zona donde está colocada la puerta. Desde la alcaldía pedánea aseguran que ambas partes tienen voluntad de solucionar el conflicto y que las negociaciones van en buen camino.
