Hablemos del aspecto más polémico. ¿Es compatible el apartamento turístico con la comunidad de vecinos?
Hay que armonizar el derecho que tiene un propietario a explotar su vivienda y el hecho de que se realice una actividad dentro de un comunidad de vecinos. No sabemos honestamente por dónde va a salir el ayuntamiento. Ha puesto a muchos departamentos a trabajar en el asunto, pero no sabemos lo que va a hacer.
¿Cuál es la solución a este conflicto, que se limite por plantas, que los vecinos lo autoricen...?
La solución tiene que ser la menos gravosa para la comunidad de vecinos. Esto no es la playa, donde todos los apartamentos son de alquiler. Aquí estamos hablando de que se pueden ocasionar molestias a los vecinos. Nosotros siempre hemos defendido que cuenta mucho la responsabilidad de quien alquila el piso. Puede haber cinco apartamentos en un bloque de diez y no haber ningún problema porque el propietario se hace responsable directo de lo que pase ahí dentro. Entonces ahí no entiendo que se tenga que limitar. El tema está en que tiene que haber una responsabilidad directa del propietario.
¿Los vecinos deberían tener voz a la hora de autorizarse una actividad de este tipo en una finca?
Yo creo que eso entra en conflicto con los derechos de los propietarios a dar una salida a sus viviendas.
¿Es optimista entonces respecto al futuro de València como ciudad turística?
Mucho, mucho. València no ha llegado al límite en cuanto a flujo turístico, está cerca, y a partir de aquí podemos trabajar en calidad y hacer que éste sea uno de los destinos más importantes de Europa. Y esto no es demagogia, es la pura verdad. Desde la asociación Apartval hay disponibilidad total para elaborar la nueva normativa. Conocemos el sector y todo el abanico turístico que hay en la ciudad.
